La oferta de jengibre de Perú es estable actualmente y, de hecho, abundante. "En el caso del jengibre ecológico, debería haber menor oferta para Europa en comparación con el año pasado porque hay nuevas normas que afectan al producto ecológico en Europa en general, también al jengibre de otros orígenes. Por ese motivo, se espera destinar algo más de oferta a otros destinos que el año pasado", explica Gino Neira, cofundador de Inkawald.
La temporada peruana comenzó con retraso porque todavía había mucho jengibre de la temporada anterior en el suelo. "Por eso la nueva temporada comenzó con fuerza en julio", dice Neira, y añade que, generalmente, la temporada debería finalizar en mayo a más tardar para permitir una buena transición a la nueva cosecha.
En Perú, el jengibre procede de la selva de Junín, la principal región, que representa, aproximadamente, el 90 por ciento de la oferta total. "Tiene el cultivo de estas raíces y las mejores condiciones ecológicas para la plantación. Hay otras regiones de la selva peruana donde también se cultiva, pero es muy poco", indica Neira, que agrega que sus productos tienen las certificaciones ecológica, Global GAP, GRASP y Smeta.
En Perú, el jengibre procede de la selva de Junín, la principal región, que representa, aproximadamente, el 90 por ciento de la oferta total.
Regiones productoras del mundo
Otros países que también están enviando jengibre a Estados Unidos actualmente son Brasil y China, aunque envían principalmente jengibre convencional.
La sobreoferta forma parte de un reto mayor en el sector del jengibre. "Este reto involucra a todos los actores de la cadena comercial del jengibre, desde el agricultor hasta las entidades gubernamentales, los exportadores y los importadores, entre otros, con el fin de hacer una planificación correcta, responsable y sostenible de la producción en el sector, evitando la sobreproducción y mejorando la calidad del jengibre peruano", expresa Neira. "Además, para lograrlo, es preciso mejorar la infraestructura de las carreteras, de los puertos y tener mejores unidades de transporte para que la logística pueda ser más eficaz con menores costos. Entonces, Perú podrá ser más competitivo como país exportador".
El equipo de Inkawald en la reciente Global Produce & Floral Show en Orlando.
Consumo en crecimiento
Por otro lado, aunque la demanda de jengibre es media ahora mismo, Neira opina que, en general, el consumo crecerá. "Desde la pandemia, la gente está más informada de los beneficios del jengibre, y por eso muchos productos –jugos, galletas, snacks, etc.– han incorporado el uso de jengibre como materia prima", apunta.
Todo esto ha hecho bajar los precios debido a la sobreoferta mundial de jengibre. Según Neira, "esto, junto con los altos costos logísticos, ha empujado los precios a la baja en origen porque el consumidor final no puede asumir estos sobrecostos logísticos y menos todavía con las crisis que atraviesa el mundo".
De cara al futuro, con las vacaciones de Navidad cada vez más próximas, la disponibilidad de personal tiende a disminuir y Neira señala que la oferta de jengibre disminuye un poco. "En diciembre, finaliza la temporada del jengibre chino y brasileño y después hay una gran demanda de producto peruano", según explica, y añade que Inkawald ha abierto una oficina comercial en Estados Unidos para la distribución en Estados Unidos y Canadá. "Además, es invierno en el hemisferio norte, cuando se incrementa el consumo de jengibre allí".
Para más información:
Gino Neira
Inkawald
Tel.: (+51) 947 656 188
gneira@inkawald.com
www.inkawald.com