¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber
Oportunidades para los saludables frutos rojos en un mercado complicado

"Los antioxidantes no son algo 'cool', pero quizás deberíamos destacar sus ventajas frente a los dulces"

En la actualidad, tal y como ocurre en otros sectores, el mercado de los frutos rojos está marcado por muchos factores. José Gandía (SAT Royal), Lisette Holmberg (ICA) y Jonathan Lock (Marks & Spencer) lo comentaron durante el reciente Global Berry Congress. Explicaron cómo los proveedores y los minoristas están teniendo que adaptarse a una nueva realidad pospandémica.

"Todo lo necesario para la producción de frutos rojos es más caro", dijo José. "Los costes del cultivo, la energía, el agua o la mano de obra son cada vez más altos. Esto, sin duda, está perjudicando al sector". Las ventas deberían ser mejores para compensar estos costes más altos; las empresas necesitan márgenes viables.

"Por otro lado, el tipo de cambio euro-dólar, las interrupciones de la cadena y la inflación también están complicando las cosas para las ventas", añadió Jonathan. En este contexto, un tema de debate clave durante el Global Berry Congress, que se convirtió en eslogan, fue "Crear más valor con menos".


Jose Gandía (SAT Royal), Lisette Holmberg (ICA) y Jonathan Lock (Marks & Spencer) con Mike Knowles (Fruitnet) de moderador.

"Eso significa lograr una mayor y mejor producción con unos costes más eficientes", explica José. "Por eso buscamos constantemente nuevas variedades con las que satisfacer la demanda. Los consumidores, sin embargo, no siempre están dispuestos a pagar más por la calidad. Unos costes más elevados pueden hacer que compren menos, pero consumir productos saludables y de calidad sigue siendo importante. El consumidor lo quiere todo: los productos deben tener buen sabor, aspecto y aroma". Lisette estuvo de acuerdo con esta conclusión, aunque no facilite las cosas.

Ha observado que en Suecia los productores también tratan constantemente de optimizar los rendimientos. "Aunque mucho depende del clima. En Suecia también ha habido olas de calor, y es necesario que los rendimientos se estabilicen, por ejemplo, recurriendo a invernaderos o túneles", dijo Lisette. El Reino Unido experimentó un problema similar, confirma Jonathan. "En agosto, tuvimos olas de calor en el Reino Unido, lo que provocó que la producción cayera un 40%. Es desastroso que algo así ocurra en esta época, cuando se necesita toda la fruta".

¿Hay soluciones para resolver estos problemas a corto plazo? Gran parte de Europa se enfrenta actualmente a problemas con el suministro energético. "Aparte de esperar a que los precios bajen, no parece haber ninguna solución", admite José. "Se puede intentar ser más eficiente con el uso de la energía, pero eso cuesta dinero. Hemos tratado de atajar este problema con paneles solares". Otra forma de contrarrestar estos costes es transferirlos a la cadena. En dicho caso, es crucial que haya buena comunicación en toda la cadena".

Jonathan estuvo de acuerdo, pero señaló que es difícil que los clientes finales asuman los costes. "El mercado está polarizado. Por un lado, hay consumidores que se dan caprichos porque comen menos fuera y preparan platos más elaborados en casa".

"Por otro lado, son más propensos a dejar de comprar aquellos productos que resultan cada vez más caros. En tales circunstancias, una alternativa barata puede, de repente, resultar muy atractiva", afirmó. Lisette subrayó que es fundamental retener a los compradores. "Puede que compren menos, pero hay que lograr que vuelvan una vez pasada la crisis. De lo contrario, puedes perderlos para siempre".

Así pues, organizar promociones es vital para demostrar el valor añadido de las frutas saludables. "Hablamos de uno de los productos más saludables del planeta. Eso –y el sabor–deberían impulsar las ventas, pero quizá habría que destacar más lo saludable de su consumo. Sin embargo, lograr transmitir ese mensaje es un reto. Los antioxidantes no son algo cool. Quizá deberíamos esforzarnos en demostrar sus ventajas en comparación, por ejemplo, con el chocolate o los caramelos", afirma Lisette.

Los especialistas también analizaron el papel del Gobierno. Regulaciones como los impuestos a los productos poco saludables o la ausencia de impuestos a las frutas y verduras se consideran medidas importantes para estimular las ventas. "Hay muchos niños obesos. Por tanto, es fundamental transmitir el mensaje a las familias. Con los niños, hay que empezar pronto. Luego, también habrá que trabajar para convencer a los adultos de optar por estos productos saludables", concluyó Jonathan.

Fecha de publicación: