Hace 130 años, Kate Leonard instaló su puesto en el mercado mayorista de Dublín. Fue en 1892, cuando Irlanda aún formaba parte del Reino Unido y las mujeres no podían votar.
Kate vendía productos en la zona en la que se construyó el mercado mayorista de Dublín, probablemente por eso consiguió un puesto en el mercado. La construcción del mercado comenzó en febrero de 1892 y finalizó en diciembre del mismo año. El edificio se basó en los planos del antiguo mercado londinense de Covent Garden y la estructura se fabricó con acero de Birmingham, muy de la época victoriana.
30 años después, Justin Leonard, bisnieto de Kate, sigue vendiendo productos frescos en un local situado justo al lado del mercado original.
El abuelo de Justin, Jack, entró en el negocio en 1925 y su padre Jackie (el pequeño Jack) y sus hermanos se hicieron cargo en 1982. El negocio pasó a llamarse Jackie Leonard & Sons cuando los hermanos se jubilaron en 1982.
Justin ha crecido en el oficio, ya que ayudaba a su padre en las vacaciones escolares y finalmente, tras un verano en el mercado, empezó a trabajar a tiempo completo en 1986. En 1990, el padre de Justin compró la antigua escuela situada junto al mercado para utilizarla como almacén.
El mercado mayorista cerró hace cuatro años, pero Justin ya tenía un lugar desde el que comerciar; algunos de los otros comerciantes también se instalaron junto al antiguo mercado, mientras que otros se trasladaron más cerca del aeropuerto de Dublín.
Según Justin, en un momento dado había 57 comerciantes en el mercado, y ahora son 10 los que siguen dedicándose a la venta al por mayor de frutas y verduras.
A la pregunta de a qué se debe el éxito del negocio, Justin responde: "Mi padre siempre decía: 'Ocúpate de tus asuntos y tendrás tu propio negocio'. Siempre nos hemos fijado en lo que quiere la gente y hemos intentado ofrecérselo. Mi abuelo solo vendía patatas, luego mi padre añadió fruta y verdura. Cuando me hice cargo de la empresa, empecé a abastecer al sector de la restauración. Nuestra filosofía siempre ha sido 'Calidad, valor y servicio', lo que nos ha dado buenos resultados a lo largo de los años.
"No todo el mundo quiere tratar con las grandes multinacionales, a algunos les gusta un comerciante local con un servicio personal. Nos encanta lo que hacemos, no es un trabajo, es una vocación".
Justin tiene dos hijos, pero no está seguro de que le sigan en el negocio familiar. "Los dos están en la universidad, pero vienen a las 4 de la mañana para ayudarme y se van a las 9 de la mañana. Aunque no sé si alguno de ellos se unirá al negocio familiar".
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Justin Leonard
Jackie Leonard & Sons Ltd.
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