Perú está viviendo un complejo momento tras la destitución y posterior detención del expresidente Pedro Castillo, después de que intentara disolver el Congreso. Las protestas, que desafortunadamente ya han dejado víctimas mortales, se han extendido en el país sumiéndolo en el caos mientras la presidenta Dina Boluarte declara el estado de emergencia en el sur del Perú y propone un adelanto de las elecciones para abril de 2024.
Las movilizaciones, según ha afirmado Bloomberg, podrían poner en peligro el suministro mundial de fruta, dado que se producen en un momento en que el mayor exportador de arándanos del mundo –y que esta temporada se convertiría en el mayor exportador mundial de uva de mesa, según David Magana, analista de Rabobank International–, está en plena temporada de cosecha.
El suministro de fruta de Perú es especialmente importante para Estados Unidos, donde la sequía y las tormentas han diezmado las cosechas nacionales, elevando los precios. Cabe recordar además, que diciembre es, junto con noviembre, meses cruciales para la cosecha de arándanos de Perú.
Sin duda, Perú ha establecido récords de despachos de fruta en el pasado pese a los eventuales problemas vividos por el país, recuerda Magana, remarcando que “la industria frutícola peruana se ha convertido en una potencia exportadora a pesar de la inestabilidad política”.
Fuente: bloomberglinea.com