"Entre un 25% y un 30% más de volumen de zanahorias que en una temporada normal". Así es como Emmanuel Schaffner, director comercial para Francia de Verduyn, describió la anterior campaña de zanahorias en Francia. Este año, sin embargo, la situación es exactamente la contraria. Para la campaña de 2023 se prevé una reducción del volumen de zanahorias del 25-30%. Una vez más, la causa es la falta de agua, que se dejó sentir notablemente de junio a septiembre: "Claro que regamos, pero el riego no sustituye a las precipitaciones naturales, y menos durante un periodo tan largo. En el futuro, me temo que los agricultores que no dispongan de un sistema de riego no podrán cultivar zanahorias, coles o brócolis".
Falta de zanahorias en el mercado
Debido a estas condiciones meteorológicas, las zanahorias llegaron quince días antes de lo previsto. Una situación que "nunca es buena señal", afirma Emmanuel Schaffner. "Habrá una gran escasez de zanahorias en el mercado. La última vez que nos enfrentamos a esta situación fue hace 3-4 años, y ni siquiera entonces llegamos a este nivel. Con el aumento de los costes de producción, el precio de las zanahorias se verá fuertemente afectado a partir de enero".
Tímido consumo hasta ahora
En cuanto al consumo, la demanda hasta este fin de semana (cuando las temperaturas invernales azotaron toda Francia) era relativamente baja: "El consumo no es extraordinario, pero las ventas fueron muy elevadas el pasado fin de semana. Por otro lado, como la oferta es bastante limitada, los precios serían bastante correctos si estuviéramos en un contexto normal, pero con estas subidas de todas las cargas e insumos que nos repercuten, desde luego no es suficiente. Las zanahorias siguen siendo un producto más barato que otros. Pero creo, y es muy necesario, que la situación se invertirá en las próximas semanas y meses".
Buena calidad
En cuanto a la calidad, según el director comercial, es la "buena noticia" de la temporada: "Las últimas lluvias les han sentado bien a las cosechas, sobre todo en cuanto a longitud y calibre, aunque no hayan compensado los tres meses de sequía. Las zanahorias, menos encharcadas, también son muy dulces. De momento, hemos sacado las primeras zanahorias de los frigoríficos hace unos diez días y estamos muy satisfechos con la calidad. Queda por ver si aguantará hasta el final del periodo de conservación. Ese es el reto de esta campaña tan peligrosa".
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