¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber
“En los cultivos es donde mejor se ve que el cambio climático existe"

El calor anómalo multiplica la producción de coliflor en La Rioja

Las temperaturas "anormalmente altas" de enero y febrero han disparado la producción de coliflor en la huerta riojana. En particular, los productores de coliflor en Calahorra están enfrentando una temporada inusual. Las condiciones meteorológicas han llevado a un crecimiento inesperado en tamaño y cantidad de coliflores, lo que requiere más tiempo y esfuerzo adicional para encontrar la mano de obra necesaria.

En la Cooperativa El Raso, la producción se ha triplicado en las últimas tres semanas, con hasta 2.000 cajas recolectadas en comparación con las habituales 500-600. "Esto es lo que ocurre cuando por el día los termómetros marcan más de 20 grados y a eso le sumas que luego vienen un par de días de lluvia, por lo que la planta se adelanta más", apunta Salvador García, gerente de la cooperativa.

Los agricultores están trabajando duro para recolectar toda la cosecha, pero enfrentan incertidumbre sobre los precios que recibirán por sus productos. "Esto es lo de siempre. Cuando hay demasiada producción, toca morir en los mercados. Son ellos, los mercados centrales, quienes pagan lo que quieren, a pesar de que esté vigente la Ley de la Cadena Alimentaria. Hasta ahora no tenemos ninguna cifra de precios porque antes tienen que vender ellos, pero en esta situación está claro que se intenta sacar lo que se puede, no lo que se quiere. Es de pena", lamenta el gerente de El Raso.

Fernando, un agricultor cooperativista, está comenzando su jornada antes del amanecer para evitar pérdidas. La rápida acumulación de cosecha puede resultar en desperdicio si no se recolecta a tiempo. La situación se agrava por la imprevisibilidad climática, que puede arruinar meses de trabajo.

Calcula que durante este mes de febrero se va a recoger prácticamente la misma cantidad de coliflor que entre los meses de enero y diciembre juntos. "En los cultivos es donde mejor se ve que el cambio climático existe. Lo que nos tocará hacer es recortar los ciclos de producción para evitar recolectar en mayo o junio, y en el caso de las de invierno, no alargar hasta abril. Antes plantábamos para recoger en septiembre porque hay buenos precios, pero es que no recoges nada por el calor que hace", reconoce.

El cambio climático también está afectando los ciclos de producción, obligando a ajustes en los calendarios de siembra y cosecha. Los precios actuales, alrededor de 3-3,50 euros por caja de coliflores, están por debajo de los costos de producción, lo que genera preocupación entre los agricultores.

El gerente de la cooperativa calagurritana aún se muestra más pesimista ante unos datos que reflejan a la perfección la realidad de este sector: "En los últimos diez años se habrá perdido el 80 por ciento de los productores de coliflor, porque la mayoría tenían más de 50 años, y yo creo que de aquí a otros diez años desaparecerá todo el mundo. Ahora mismo en la cooperativa solo tenemos dos socios por debajo de 40 años".

Fuente: nuevecuatrouno.com

Fecha de publicación: