La campaña de sandía marroquí se ve afectada por un fuerte declive en los volúmenes este año. La producción en varias regiones del país ha sufrido limitaciones o incluso se ha prohibido este año. Es el caso de la provincia de Tata, donde la producción de sandía ha sido suspendida por completo.
Moulay Ahmed Errahmani, agricultor de la provincia en cuestión, explica: "Marruecos está experimentando un severo estrés hídrico, y nuestra región es una de las más afectadas. Por lo tanto, como es natural, la producción de sandía se ve afectada. Este año, no habrá sandías provenientes de nuestra región, lo que supondrá la falta de 110.000 toneladas en el mercado".
La producción de sandía a escala comercial es reciente en la región, dice Errahmani. "Comenzó alrededor de 2012 con un puñado de productores y un volumen pequeño. El producto encontró una muy buena recepción en los mercados nacionales e internacionales, y la industria creció hasta un máximo de 4.200 hectáreas en 2020. Pero las condiciones meteorológicas y la constante sequía que el país está experimentando han puesto los contadores a cero".
"En 2020, las autoridades locales anunciaron y luego adoptaron medidas restrictivas progresivas, lo que marcó la transición a cultivos alternativos. Así pues, esta temporada se ha impuesto una prohibición clara. La economía local, por lo tanto, ha sufrido un duro golpe, pero somos conscientes de que esta prohibición va en favor de los intereses de los ciudadanos de la región y está dictada por la realidad de la situación climática que enfrenta el país. Aunque ha llovido recientemente en el norte y oeste del país, en nuestra región no ha caído ni una gota de lluvia, así que tenemos que adaptarnos para darle un respiro al acuífero".
Por consiguiente, los agricultores han convertido sus superficies a otros cultivos. "Actualmente hay una producción comercial bastante variada. Hay tomates, cebollas, calabacines y otras verduras. Por mi parte, he cambiado a la producción de cebolleta. Los resultados son satisfactorios, con buenos rendimientos y buena demanda. Esta temporada, la cosecha de cebolleta está programada para junio, con la perspectiva de exportarla por primera vez", señala Errahmani.
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Moulay Ahmed Errahmani
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