El sector de la papa en Canarias se encuentra en una situación crítica, con miles de kilos de papa canaria acumulándose sin compradores y que corren el riesgo de terminar en la basura. Este año, el cultivo ya había sido golpeado duramente por la sequía, y ahora, la importación de papa de Egipto está complicando aún más el panorama para los agricultores de las islas.
Los problemas para el cultivo de la papa canaria comenzaron con las semillas, agravados por las condiciones de calor y sequía. A esto se suma la creciente competencia de las papas importadas de Egipto, que se ofrecen a precios significativamente más bajos que los de la producción local, presionando a los intermediarios para adquirir la papa canaria por debajo del costo de producción.
Ante esta adversidad, los agricultores canarios se han visto forzados a adoptar medidas extremas, como almacenar hasta 200.000 kilos de papas en cámaras frigoríficas o intentar venderlas directamente ellos mismos, a fin de mitigar las pérdidas de una cosecha que ya de por sí ha sido difícil de obtener.
Fuente: rtvc.es