"En nuestra tercera generación y en el umbral de los setenta años de actividad, integramos tradición e innovación para utilizar los recursos de forma correcta y concienzuda", afirma Antonio Bolla, propietario de la empresa Agribolla en Nettuno (Roma). La empresa abarca 19 hectáreas cubiertas de invernaderos multitúnel y, desde hace unos años, ha introducido una dinámica de producción diferenciada entre los periodos de invierno y verano.
"Durante el invierno, la superficie se aprovecha al máximo para el cultivo de acelgas, achicoria, espinacas y perejil para la I y IV gama, a los que se añaden apio y lechuga Trocadero", explica Bolla. "En verano, en cambio, se llevan a cabo rotaciones y solarizaciones, introduciendo cultivos adicionales como la judía verde, el pepino y la berenjena. Esto garantiza no solo una ventajosa diversificación del mercado, sino también una fertilidad óptima del suelo".
Antonio Bolla, propietario de la empresa Agribolla.
Gestión perfecta de los cultivos gracias al DSS
La renovación es la clave para superar los retos climáticos y de mercado, y pasa por los sistemas de apoyo a las decisiones (DSS) y los nuevos procesos de producción. "Entre los retos a los que nos enfrentamos están sin duda la productividad y la contención de los costes de producción", prosigue Bolla. "Las nuevas tecnologías son una herramienta útil y fiable para garantizar la toma de decisiones rápidas, correctas y eficaces. Tras probar otras soluciones, nos decantamos por Evja y su DSS patentado: nos ayuda a nosotros y a otras empresas a optimizar el uso de los dispositivos fitosanitarios, garantizando al mismo tiempo la salubridad del medio ambiente y de los productos cultivados".
"Lo primero que hago cada día es conectarme al portal Evja e inmediatamente leo la información que el sistema ha recogido para mí", relata Bolla, "y en función de esta información empiezo a tomar decisiones, compruebo si los riegos han sido correctos, si la sanidad vegetal o vegetativa de la planta está salvaguardada. Y lo mismo cuando estoy lejos de la explotación".
El DSS es parte integrante de la rutina diaria de la explotación, porque "nos permite evaluar con datos científicos si es necesario sombrear, calentar, ventilar, regar y abonar, convirtiéndose en un apoyo práctico a la experiencia de quienes hacen del cultivo su oficio y misión", concluye Bolla.
Para más información:EVJA S.R.L.
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Antonio Bolla
Empresa agrícola Agribolla
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