Apple and Pear Australia Limited (APAL) empleará los 636.970 dólares para inspeccionar a los productores de frutas y sugerirles modos de recortar gastos.
La portavoz Annie Farrow explica que, después de los salarios, la electricidad es el segundo mayor coste derivado de las cámaras de enfriamiento, la alimentación de los sistemas de riego y la iluminación de las naves de embalaje.
"Si se suman todos esos sumideros de energía, existe un gran potencial para que los productores y los operadores de naves de embalaje puedan realizar cambios si identificamos áreas específicas, nuevas tecnologías y cambios de comportamiento".
"Estimamos un potencial de ahorro de al menos el 20 por ciento".
Las inspecciones se llevarán a cabo en todo Australia en diez regiones y APAL colaborará con Summerfruit Australia y Cherry Growers Australia para reunir a participantes y realizar seminarios durante el próximo año y medio.