En el mercado frutícola hay quien dice que este pronunciado aumento del precio también podría atribuirse a que se avecina el final del periodo de amnistía para los trabajadores inmigrantes, ya que no muchos de estos trabajadores —que trabajan en las explotaciones— han logrado rectificar su estatus y transferir su patrocinio a otro patrocinador y se han marchado o están planeando marcharse antes del periodo de gracia.
Los empresarios del mercado frutícola también han rechazado reducir el precio, ya que el suministro es escaso y la demanda está en alza. Abdullah Isakh, empresario de la ciudad de Najran, explica que el aumento de los precios por parte de los propietarios de las explotaciones y de los mayoristas no está justificado. Según él, "el cambio reciente en el mercado laboral local ha sido un factor importante. El número de trabajadores inmigrantes ha disminuido, así como los crecientes costes y la mano de obra. Al final, el consumidor siempre sufre a causa del aumento de los precios.
Al-Watan se reunió con Khaled Al-Atallah, el responsable de la delegación del Ministerio de Trabajo en Najran y le preguntó acerca de la relación del incremento del precio y la amnistía. Según él, el incremento del precio es normal en estos momentos porque en el mercado no quedaban trabajadores ilegales controlando el mercado. Ahora el mercado se limita a unos pocos puestos. "El principal factor para el aumento del precio de los tomates son los propios empresarios, que, de forma intencionada, han creado la escasez en el mercado. Esto se debe en parte a que no existe supervisión en el mercado frutícola".
Fuente: saudigazette.com.sa