LGV Frischgemüse entra en el sector de los establecimientos de conveniencia

La corporación austriaca de vegetales LGV Frishgemüse ha tenido mucho con lo que lidiar el pasado año: frío, tormentas y después calor extremo en el verano, lo que no facilitó la tarea a los productores de hortalizas. Y, como si las condiciones atmosféricas no fueran suficiente, los productores de vegetales austriacos sufrieron la presión extra de la reducción de salarios en el extranjero.

Para ser capaz de producir en esta coyuntura del mercado, LGV-Frischgemüse ha desarrollado ahora su propio surtido de productos listos para consumir o, como se suelen llamar, de comida rápida. LGV está ahora mismo preparando ensaladas listas para comer en su sala de producción en Raasdorf, Austria. "Aquí somos capaces de preparar los productos más especializados", explica el director de LGV, Gerald König.

La compañía ha invertido 1,5 millones de euros en la sala, pero el edificio no es el mayor gasto. La maquinaria de lavado y cortado cuesta 1 millón de euros y lo siguiente será una nueva máquina de secado. "Estamos produciendo un producto industrial", explica König. Aunque esto tiene la ventaja de ahorrar en el mayor factor operativo: la mano de obra. La sala necesita 30 operarios para cortar vegetales. En total, la cooperativa ofrecerá trabajo a uno 60 empleados y en el verano tendrán 100 empleados de temporada. Si los productores de vegetales se incluyen en la cifra, estaremos hablando de unos 2.000 trabajadores.