En el programa de su campaña 2013-2015, la Asociación Marroquí de Exportadores (ASMEX, por sus siglas en francés) ha citado el mercado ruso entre los destinos que podrían estimular la exportación y los servicios marroquíes.
Rusia se ha convertido en el cliente número uno de los cítricos de Marruecos, pues recibe el 60% de las exportaciones; Norteamérica recibe entre el 10 y el 15% y la Unión Europea, el 30%. En 2012/2013, Marruecos envió casi 200.000 toneladas de mandarinas a Rusia, un aumento del 52% respecto a las temporadas anteriores.
El Maroc Fruit Board, el mayor grupo de exportadores, espera triplicar estas cifras para 2015, especialmente creando nuevas oportunidades en Canadá, los Estados Unidos, Asia y África.
Según los profesionales, mediante el uso de contenedores para el transporte se mantiene la calidad y la cadena del frío y se consigue más flexibilidad. También resulta menos caro, pero el tráfico también es algo más lento (de 24 a 48 horas).
Mediante el objetivo de convertir a Rusia en su principal mercado, la exportación marroquí atravesará un proceso de diversificación de mercado y de reposicionamiento de mercado con Gran Bretaña, Alemania y el Benelux.
Según el ministro marroquí, Mohamed Abbou, a cargo del comercio exterior, el mercado europeo supone el 70% de la exportación hortofrutícola marroquí.
Los productores también apuntan a otros mercados como Asia, en particular China, donde ya se han entregado contenedores de clementinas gracias a un acuerdo fitosanitario firmado por las autoridades sanitarias.