"En primer lugar, ha habido más fruta europea. Esto ha significado que la temporada de ultramar comenzara más tarde y, debido a este retraso, se han acumulado las existencias. La 'ventana' para la temporada de fruta de pepita de ultramar también se ha reducido debido a que la nueva temporada europea comenzará más pronto a causa de unas temperaturas más cálidas. La fruta de verano también ha afectado a la fruta de pepita, porque estuvo disponible muy temprano a precios bajos casi de forma inmediata. El consumidor optó por ella enseguida. Este año apenas hemos tenido invierno y a continuación llegó una primavera cálida. En estos momentos también hace calor, los colegios están de vacaciones y se compran menos manzanas y peras. Se opta por los melones, la fruta de hueso y otras frutas de verano. Esto ejerce una presión enorme sobre el producto de ultramar".
Stefanie dice que, por suerte, Capespan había planeado menos importaciones. "Esto se debe en parte a que estamos tratando de anticiparnos, pero también a que en Sudáfrica y Chile la cosecha fue menor debido a las condiciones meteorológicas. Si esta hubiera sido una temporada normal de importación, habría sido incluso peor".
Para las manzanas ha sido difícil, pero ha sido todavía peor para las peras. "En los países de ultramar hay menos oportunidades de ventas para las peras que para las manzanas. Europa es el comprador más importante de ciertas variedades de peras, pero también ha habido mucha cosecha propia. Las peras han sufrido mucha más presión y siguen sufriéndola. Estarán disponibles un par de meses más. Estamos luchando por sacar a la venta las últimas peras en estos momentos, ya que las peras españolas y francesas ya han salido. Ahora nos centramos en la Abate Fetel. El suministro está descendiendo, pero todavía hay mucho producto disponible. Las Forelle son las últimas, se han quedado un poco al margen debido a que estaban aumentando las ventas de las Abate Fetel. Así pues, las peras lo han tenido difícil".
Las últimas manzanas tampoco lo están teniendo fácil, pero tienen algunas ventajas. "Una variedad como la Pink Lady podría ponerse al día con la temporada. La Granny Smith también está ganando posiciones en estos momentos. Aún está llegando mucha mala calidad de esta variedad desde Chile, y en el mercado hay muy poco producto sudafricano a causa del granizo que han sufrido en el país, así que se paga más caro. La temporada de la Granny no durará mucho más, pero podría mejorar en las próximas cuatro semanas. No es que se estén vendiendo más Granny en comparación con el año pasado, sino que hay menos producto disponible".
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Stefanie De Puysseleir
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