Los constantes envíos de piñas de Costa Rica han mantenido bajos los precios, tanto para la fruta centroamericana en la costa este y para las importaciones mexicanas. Pese a que la naturaleza irregular del mercado de la piña en los últimos años dificulta predecir hacia dónde irán los precios, se prevé que el mercado permanezca así o baje para cerrar el año.
"Hemos visto mucha fruta de Costa Rica, lo cual ha puesto muy difícil a los productores mexicanos poder competir", explica Elizabeth Chang, de Bananera Muchachita, McAllen, Texas. "Este último mes, el mercado ha estado inundado de piñas de Costa Rica y Honduras". Eso, junto con una demanda ligeramente débil, ha mantenido los precios a raya. El 10 de diciembre, una caja de Golden Ripe de calibre 5 de México costaba entre 5,50 y 7,50 dólares en las fronteras de Texas, y las cajas de Costa Rica, Ecuador y Panamá costaban 8 dólares.
"La fruta de Centroamérica y Sudamérica suele ser más cara que la mexicana, aunque la calidad sea muy similar", apunta Chang. Añade que el mercado de la piña tiende a cerrar el año con precios bajos, por lo que espera descensos este mes. No obstante, considerando la forma en que se ha comportado el mercado de la piña en los últimos años, es imposible saber si es eso lo que ocurrirá.
"Durante los últimos cuatro o cinco años, el mercado de la piña ha sido muy inestable", indica Chang. "Los precios suben y bajan, y no hay ninguna regla por la que saber cuándo habrá picos. El mercado ha sido como una montaña rusa durante los últimos cuatro años".
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Elizabeth Chang
Bananera Muchachita
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