Alba Casares manifestó que la cosecha arrancó con la variedad Irwin, Tommy Atkins y más adelante llegará Osteen y el Keitt; "no obstante, como casi siempre ocurre, los buenos precios iniciales del mercado y el desconocimiento para muchos agricultores hace que corten la fruta para comercializarla antes de tiempo de maduración, y esto provoca no solamente una mala imagen para el consumidor al comprar o consumir un producto que no está en las mejores condiciones, sino también una caída de precios para el agricultor que si recolecta en tiempo y óptimas condiciones de maduración", dice el edil almuñequero.
Almuñécar, centro principal de cultivo y comercialización de la chirimoya, ya ha iniciado la comercialización de este "oro verde" que supone para la comarca sexitana. "Por lo pronto, la cosecha que se hace y que ya se puede ver en los mercados es la que se produce en las zonas más tempranas. Sin embargo, es una fruta que cada vez se está ampliando más su cultivo, no en la cantidad, que será similar al pasado año, sino en el calendario con la fruta de primavera, algo que se está consiguiendo gracias a los trabajos de experimentación que se llevan a cabo por técnicos especialistas en La Mayora, La Nacla, además de nuestra finca municipal El Zahorí", explica.