Esta temporada ha sido especialmente complicada para los productores de melón. Con las cálidas temperaturas, la temporada comenzó antes de lo previsto y con volúmenes importantes. Esta llegada temprana y masiva de la producción hizo que el mercado cayera por debajo de los precios dignos para los productores. A continuación, las tormentas de granizo y las temperaturas frescas de principios de julio en el centro-oeste y el suroeste afectaron a la producción provocando defectos de cuajado que dieron lugar a un menor rendimiento. "Realmente hemos tenido un descenso importante en la cosecha, que ha sido mucho más larga de lo que esperábamos. Hoy en día, no hay suficiente producción para satisfacer la demanda. Una escasez de cosecha que se extendió hasta la semana del 15 de agosto, que se supone que es la época más productiva de la temporada. "Los tonelajes franceses se sitúan actualmente entre 2.000 y 2.500 toneladas diarias, cuando deberían ser de 4.000 a 4.500 toneladas diarias", informa Joël Boyer.
Afortunadamente, se espera que la producción remonte a partir de mediados de la semana, aunque la falta de agua repercute inevitablemente en los calibres. "Tuvimos varios clientes que solo querían el calibre 12 sin querer el 15, lo que complicó todavía más las cosas a los productores. Pero ante la falta de disponibilidad de los de 12, acabaron comprando los de 15. Los productores están absolutamente hartos de la falta de disponibilidad de agua. Están hartos de que se les impida crear reservas de agua en invierno para poder hacer frente a la sequía en verano. Con el racionamiento cada vez más drástico del agua, se están perdiendo algunos melones, mientras que la demanda en este tiempo de calor es especialmente alta. La ira empieza a crecer en nuestro campo y, si no se hace nada, ¡los productores no se van a calmar!".
Para más información:
Joël Boyer
Boyer
Móvil: 06 07 63 85 73
joel.boyer@philibon.com
https://www.philibon.com