Hay muy poca piña disponible, ya que la superficie plantada se ha reducido en países como Costa Rica. ¿La razón? Durante varios años los precios pagados a los productores han sido bajos, no ajustados a los costes, y los agricultores se han cansado de no ganar dinero con el cultivo.
Foto de archivo.
Un importador del norte de Italia hace balance de la situación: "Dentro de unos días llegarán algunos volúmenes más. Luego, en las próximas semanas, habrá más escasez de producto, lo que agravará la situación actual. Ahora una caja de 12 kg cuesta alrededor de 15,5-16 euros al por mayor para las piñas de gran calibre, pero las condiciones meteorológicas en los países productores no permiten obtener piñas de gran tamaño".
El operador dice que si los precios de las piñas, así como de muchas otras frutas y hortalizas, no remuneran adecuadamente a los productores, habrá un riesgo cada vez mayor de quedarse sin producto.
"No recuerdo una situación similar a finales de mayo: falta de producto y precios altos. El año pasado a los productores se les pagaron precios ridículamente bajos, así que han sembrado mucho menos. Dejé de trabajar con el retail, ahora solo trabajo con los mercados mayoristas y tiendas especializadas. Nos enfocamos en productos de calidad por los que se paga un precio correcto. La política de precios cada vez más bajos estrangula a los agricultores y pone en riesgo a toda la cadena de suministro".