Los bajos niveles de agua en el lago Gatún obligaron a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) a restringir el número de buques diarios que pueden realizar el tránsito a 32 por día, y a reducir en cerca de dos metros su calado máximo para sus esclusas Neopanamax (13,41 metros), lo que provocó durante la primera semana de agosto un retraso de 15 a 19 días de promedio por buque, así como enormes colas en ambos lados de la vía interoceánica.
Si bien las precipitaciones se han vuelto a producir en Panamá, es poco probable que las autoridades hagan una revisión que permita incrementar el número de tránsitos en el corto plazo, conscientes de los efectos del fenómeno meteorológico El Niño de este año, que tiende a producir un clima más seco en el país centroamericano.
La ACP ya ha admitido que podría recibir un golpe de hasta US$200 millones en ganancias para el próximo año si las condiciones persisten.
Impacto en las tarifas
Peter Sand, analista jefe de Xeneta, indicó a Splash que “el Canal de Panamá es realmente el comodín en el mercado de transporte de contenedores en este momento debido al impacto potencial que puede tener en las tarifas de flete y las importaciones estadounidenses desde el Lejano Oriente de una semana a la siguiente”.
Ya en la semana anterior, al 01 de agosto, la tarifas en ruta Asia-USEC se incrementaron un 3% a US$2.598/FEU, según el Freightos Blatic Index (FBX). Mientras que el World Container Index de Drewry para la ruta Shanghái-New York, establecía el 3 de agosto un promedio semanal de US$3.330/FEU.
Fuente: mundomaritimo.cl