La temporada del albaricoque está ya a punto de terminar; las entregas se han reducido, la calidad de la oferta se ha deteriorado, y los clientes ya no se han mostrado tan ávidos como antes. Han predominado las partidas francesas, con las italianas y españolas cumpliendo un papel meramente complementario. La fruta local desapareció de algunos mercados durante la semana y llegó a costar entre 4,70 y 4,80 euros por kg en Fráncfort.
Los albaricoques turcos han seguido siendo populares, pero también han perdido terreno. Aunque la disponibilidad en general ha sido limitada, según el BLE, ha sido suficiente para satisfacer la demanda. Los precios han tendido a subir debido a los mayores volúmenes, aunque solo mínimamente, aunque en ocasiones también se han visto afectados por la inconsistencia de las propiedades organolépticas de los lotes.
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Manzanas
Poco a poco, las frutas de nueva cosecha han ido ganando terreno. Las Summercrisp y Sansa de producción local se incorporaron a las ya establecidas Arkcham, Delbarestivale, Galmac y Summerred. Incluso llegaron las primeras Early Jonagold y Elstar.
Peras
Hubo un aumento notable de la oferta de fruta italiana, francesa, española y turca. Se incorporaron a la gama las Williams Christ rojas francesas y las Williams Christ procedentes de Italia, Alemania y Francia. En términos de calidad, los lotes europeos y turcos gozaron de una clara ventaja sobre la fruta importada de ultramar.
Uvas
Las uvas italianas dominaron claramente el mercado, con la Victoria y Black Magic como abanderadas. Las primeras Michelle Palieri llegaron a Fráncfort y Colonia. Las Italia se ofrecieron en Múnich y, tras algunos problemas iniciales, acabaron vendiéndose con bastante rapidez.
Cerezas
La temporada terminó de manera poco espectacular, con una oferta notablemente limitada de cerezas locales y turcas. También ha seguido habiendo disponibilidad de cerezas polacas, holandesas, belgas e italianas, aunque han perdido relevancia.
Limones
Además de la oferta dominante sudafricana, también hubo lotes argentinos y españoles, sobre todo en el mercado de venta al por menor. Las ventas fueron tranquilas y la demanda se satisfizo sin problemas.
Bananas
Durante la temporada de vacaciones de verano, que aún no ha terminado en muchas partes de Alemania, las ventas suele ser bastante tranquilas. Una oferta adaptada a unas ventas reducidas suele garantizar precios estables.
Coliflor
Además de los productos nacionales dominantes, en ocasiones también ha habido algunos lotes de los Países Bajos, Polonia y Bélgica. La oferta se vio limitada por el mal tiempo y no se ha podido siempre garantizar la satisfacción de la demanda.
Lechuga
Como en semanas anteriores, los lotes nacionales gozaron de una posición muy sólida. Además, ha habido disponibilidad sobre todo de lotes belgas y holandeses. En principio, la demanda pudo satisfacerse sin problemas; no obstante, los precios subieron con frecuencia.
Pepinos
En cuanto a los pepinos, solo había mercancía nacional, belga y holandesa y la disponibilidad fue claramente limitada. En cambio, la demanda aumentó aquí y allá, por lo que los precios en ocasiones subieron.
Tomates
La oferta fue notablemente limitada, con un suministro claramente más reducido de fruta belga y holandesa. La demanda no fue especialmente elevada y, de hecho, pudo satisfacerse sin mayores problemas. No obstante, los precios subieron en casi todos los mercados.
Pimientos
Las lluvias persistentes en las zonas de cultivo limitaron notablemente la cosecha. Como consecuencia, se realizaron muy pocos envíos desde los Países Bajos. La demanda no pudo satisfacerse del todo. Los productos belgas tampoco pudieron evitar del todo la escasez. Los precios subieron, en algunos casos de manera considerable.
Fuente: BLE
