La elección entre el cartón o el plástico sigue siendo un tema candente en el sector hortofrutícola. Durante mucho tiempo, pareció que muchos mercados apostaban por la prohibición total del plástico, pero desde el aumento de soluciones reciclables de plástico, todo apunta a que el debate va a continuar un tiempo más. Ronald Zwaga, de Stackpack, aboga por el cambio a las soluciones de cartón y, con la presentación de su nueva máquina en línea para el termosellado de tarrinas de cartón de fabricación propia, espera facilitarles el cambio a las empresas. "Costó más de lo esperado o planeado, pero con el uso de esta nueva máquina, las empresas pueden termosellar rápidamente las tarrinas de cartón in situ", indica Ronald.

Stackpack se asoció con Zalpak, que se especializa en soluciones de termosellado para frutas. "Zalpak lleva años fabricando tarrinas de cartón para frutas y hortalizas, y es un agente destacado en tarrinas cónicas". Además de Zalpak, Ronald y sus socios fundaron Halopack hace dos ce años. Halopack fabrica tarrinas de cartón termoselladas impermeables a los gases. Combinando tarrinas para frutas y hortalizas y termosellado, se creó Stackpack hace cinco años. Ronald suministra soluciones para tomates, pepinos, frutos rojos y, por ejemplo, dátiles y hierbas aromáticas. Desde entonces, a Stackpack se le ha concedido la patente –tras una espera de cuatro años– para sus tarrinas de desarrollo propio. Ahora, con el lanzamiento de su nueva máquina en línea, también se ha simplificado la fabricación de las nuevas tarrinas.
"Lo que diferencia a estas tarrinas es que el perfil del sellado está muy firme, por lo que la lámina se mantiene tensa. Con el cartón, a menudo los bordes del sellado se levantan cuando apilas los envases; nosotros hemos buscado la manera de que no ocurra. Y hemos tenido éxito; la primera versión desarrollada lleva ya en el mercado siete años. No obstante, hay que mantener la tensión en las solapas adhesivas, y muchas veces no se puede conseguir que no se levante ninguno de los cuatro bordes; lo hemos solucionado uniendo las esquinas durante el termosellado. Funciona y solo se necesita un poco más de tiempo de sellado. Además, la investigación en Inglaterra demuestra que esta solución de cartón incluso mejora la vida útil de un producto un 71%", asegura Ronald.

"En 2019 comenzamos a fabricar estas soluciones en las máquinas que ya había. Sin embargo, la desventaja era que los clientes tenían que comprar una nueva máquina de sellado para termosellar esas bandejas de cartón. Además, tenemos muchos clientes que están lejos, como en Estados Unidos y Australia, y que nos hacen grandes pedidos. Por lo tanto, teníamos que enviarlo todo en contenedores. Además, el sellado se alargaba bastante porque la máquina, para la que se necesitan trabajadores verdaderamente cualificados, tenía que finalizar parte del envasado antes".
Máquina en línea
Todos ellos fueron motivos por los que la firma se puso a trabajar en una nueva máquina en línea más sencilla que las empresas de todo el mundo pudieran utilizar para fabricar sus propios envases. "Queríamos una máquina que pudiéramos instalar en línea en las empresas. Una que pudiera manejar un trabajador habilidoso. Además, las empresas pueden obtener el cartón de fuentes locales. Esta nueva máquina facilita muchísimo el termosellado y ahorra un tiempo considerable en el proceso", explica Zwaga.
Llevó más tiempo de lo previsto, pero hace unas cuantas semanas, Stackpack por fin pudo presentar esta máquina en línea, que también puede trabajar con los otros dos envases que ha desarrollado la empresa. "Ahora tenemos una solución en línea y offline cuyas esquinas están unidas entre sí y con la característica única de que la lámina se mantiene tensa. Si bien la máquina no es más rápida que la anterior, es más fiable, y las empresas pueden ahorrar en mano de obra. Antes, había que dedicar en exclusiva un operario a una máquina; ahora, un trabajador competente puede operar dos".
Cambio inevitable al cartón
No obstante, la ventaja más destacada de la máquina, según Ronald, es que permite que las empresas termosellen los envases in situ rápidamente. "De nuestra producción actual, el 25% va a Estados Unidos, donde los 'proveedores nacionales' son esenciales. Con la implantación de esta máquina resulta mucho más sencillo encontrar socios locales que fabriquen los envases, que después las empresas pueden termosellar. Ya estamos trabajando con un socio australiano que ha empezado a trabajar en esto", explica Ronald.
Ronald opina que es difícil saber si el desarrollo de esta nueva máquina garantizará un cambio en masa al cartón. "Ya hay mucho interés en ver la máquina. La gente quiere saber si pueden comenzar con la fabricación local de los envases. Sin embargo, el cartón tiene una consideración distinta en función del país. Ya está más afianzado en el sector hortofrutícola que, digamos, en el de la carne o el pescado. El ritmo de transición de cada mercado también es distinto. Inglaterra, Bélgica, Alemania y Francia van muy bien".

"En Alemania, por ejemplo, es posible que el envase solo contenga un cinco por ciento de plástico; en Francia, es un cero por ciento. También para eso tenemos soluciones. Espero, además, mucho interés por parte de Estados Unidos, con sus muchos 'estados verdes'. Son mercados importantes para nosotros. En Países Bajos, en cambio, la transición es un poco más lenta. Creo que todo el mundo debería prepararse para la transición al cartón que va a terminar produciéndose. Lo único que queda por ver es la velocidad a lo que ocurrirá", concluye Ronald.
Ronald Zwaga
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