La oferta de pepinos en la semana 20 procedía de Alemania, los Países Bajos y Bélgica. En cuanto a los pepinos mini, se disponía de partidas holandesas, nacionales y algunas turcas. Según la BLE, la disponibilidad se había ampliado en ambos sectores. Aunque la demanda no fue mala, en general no pudo dar abasto con la oferta. En Múnich, la demanda de variedades nacionales disminuyó considerablemente a principios de semana, por lo que, como era de esperar, también hubo que rebajar considerablemente los precios.
© BLE
Cuotas de mercado de los pepinos (izquierda) y los pepinos mini.
Las cotizaciones en las subastas de los países del Benelux también bajaron debido al volumen. En la mayoría de los casos, los precios de compra más bajos se trasladaron a los clientes, lo que explica la caída de los precios. Las rebajas aceleraron puntualmente la comercialización; los comerciantes pudieron reducir sus existencias y evitar excedentes. Solo los productos nacionales de pequeño tamaño escasearon en ocasiones, por lo que en algunos lugares incluso se encarecieron ligeramente.
El informe completo se puede consultar aquí.
Manzanas
La actividad comercial estuvo tranquila en general. Siguió dominando el producto nacional, acompañado principalmente por lotes italianos y franceses.
Peras
Predominó la oferta sudafricana: la importancia de la variedad Forelle aumentó notablemente, mientras que la de Rosemarie se redujo considerablemente. Las variedades Abate Fetel y Cheeky siguieron desempeñando un papel importante, mientras que Williams Christ perdió cuota de mercado.
Uvas de mesa
Las importaciones chilenas encabezaron la oferta y ganaron aún más importancia. La demanda se satisfizo sin problemas.
Fresas
Las frutas nacionales dominaron frente a las holandesas. En general, la calidad de los productos fue satisfactoria: los comerciantes pudieron mantener sus precios, a pesar del aumento de la disponibilidad.
Melocotones y nectarinas
Al inicio de la temporada, los lotes españoles constituyeron la base de la oferta. El suministro creció de forma evidente y también aumentó la variedad de calibres. Sin embargo, el tamaño de la fruta no siempre convenció; los calibres demasiado pequeños no despertaron el interés de los compradores.
Albaricoques
La disponibilidad se amplió. Las posibilidades de almacenamiento mejoraron gracias al aumento de las temperaturas hacia el fin de semana. Por ello, aquí y allá los comerciantes pudieron aplicar subidas de precios.
Limones
El suministro de limones Verna españoles fue más bien escaso, por lo que se repitieron los altos precios de la semana anterior. En algunos lugares, incluso subieron un poco más.
Bananas
La disponibilidad se ajustó en general a las posibilidades de conservación. Solo se registraron desviaciones puntuales. No obstante, los precios variaron con frecuencia.
Coliflor
La demanda fue bastante buena. No obstante, los precios tendieron a bajar de vez en cuando, ya que en esta época del año los clientes buscan otros tipos de productos.
Lechugas
En el caso de las lechugas, la relevancia de los productos españoles se redujo notablemente: la temporada llegó a su fin y en algunos lugares desaparecieron del mercado. La calidad tampoco fue convincente en todos los casos, por lo que se definió una amplia gama de precios en algunos casos.
Tomates
La oferta belga y holandesa dominó indiscutiblemente. El calor mejoró la demanda. Sin embargo, no siempre se pudieron evitar las rebajas de precios, ya que la oferta se había incrementado demasiado.
Pimientos
En general, la disponibilidad aumentó y superó la capacidad de almacenamiento. Por lo tanto, no siempre se pudieron evitar las caídas de precios.
Espárragos
Parece que se ha superado el pico de la temporada: tras el Día de la Madre se produjo una cierta saturación de la demanda y la capacidad de almacenamiento se redujo notablemente. Sin embargo, las entregas nacionales siguieron aumentando.
Fuente: BLE
