Los futuros del zumo de naranja han experimentado un notable repunte en Nueva York tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump de imponer un arancel del 50% a los productos brasileños, una medida que podría alterar de forma significativa el suministro hacia Estados Unidos.
El contrato más activo alcanzó un incremento intradía del 8,7%, situándose en 3,1385 dólares por libra, el nivel más alto desde el 6 de marzo. Esta subida se produce en un contexto de tensiones comerciales que afectan a varias materias primas, entre ellas el café y la carne de vacuno, desde que la semana pasada Trump adelantara la entrada en vigor de nuevos gravámenes a partir de agosto.
Brasil es el principal proveedor de zumo de naranja para el mercado estadounidense. Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, en 2023 las importaciones procedentes del país sudamericano rozaron los 1.000 millones de dólares. Le sigue México, cuyas exportaciones representan aproximadamente un tercio del volumen brasileño.
La posible interrupción del flujo comercial se da además en un momento en que la producción nacional, especialmente en Florida, continúa en retroceso. Esta situación ha aumentado la dependencia estadounidense del zumo brasileño, según señala Craig Elliott, analista de la firma Expana. A su juicio, aunque el impacto final del arancel sigue sin estar claro, el volumen de comercio afectado es lo suficientemente relevante como para debilitar aún más la competitividad de Brasil en un mercado ya complejo.
Según informó CNN Brasil, el Gobierno brasileño podría solicitar una rebaja del arancel del 50% al 30%, así como negociar cuotas de exportación para productos como el café y las naranjas. En paralelo, los futuros del café arábica, del que Brasil es el mayor productor mundial, también reaccionaron al alza, con una subida de hasta el 4,4 % este lunes, el mayor avance intradía desde abril.
El analista Mark Bowman, de ADM Investor Services, advirtió de que la imposición de aranceles perjudicaría gravemente los envíos de café brasileño a Estados Unidos, impulsando los precios en ese país y generando un excedente de producto en el mercado global. Además, anticipa que aumentaría la demanda de café ya almacenado en los depósitos registrados en la bolsa estadounidense, lo que también contribuiría a una escalada en los precios de los futuros.
Fuente: bloomberglinea.com
