El sector del aguacate de las regiones de gran altitud de Haenertsburg y Magoebaskloof, en Limpopo, ha sufrido daños por heladas que se espera que influyan en la producción actual y futura.
Dave Pirie, productor de aguacates de Haenertsburg, afirma: "No se deberían plantar aguacates aquí en la montaña. Hay mucha altitud y hace frío, y es cualquier cosa menos tropical, pero si consigues cosechar aguacates, te beneficias de una ventana de mercado fuera de la temporada normal, cuando los precios son muy buenos". Señala que los principales riesgos de producción de la zona son el frío y los daños por heladas, como ocurrió a finales de julio.
Los días 29 y 30 de julio, las temperaturas descendieron hasta los -5 °C en Haenertsburg y Magoebaskloof. Si bien Pirie registró daños menores en su explotación, otros agricultores se vieron más afectados. Bram Snijder, consultor agrícola y vicepresidente de la Asociación Sudafricana de Productores de Subtropicales (Subtrop), afirma que algunas explotaciones perdieron hasta la mitad de su cosecha, y que las heladas también afectaron a los árboles que ya estaban en flor, lo que ha reducido la producción prevista para el próximo año.
Según la horticultora Kondi Munzhedzi, de la Asociación Sudafricana de Productores de Aguacate (SAAGA), entre el 10% y el 20% de la cosecha de este año es insalvable, y la del año que viene también será menor. Indica que, dado que muchos árboles han sufrido daños por el frío, los efectos podrían seguir siendo visibles dentro de dos años. Snijder añade que algunos árboles jóvenes recién plantados murieron y habrá que replantarlos.
Las regiones de Haenertsburg y Magoebaskloof han atraído a pequeños y grandes productores, como Mahela Group, Laeveld Citrus y Lombard Spies, que buscan suministrar aguacates del interior hasta diciembre y enero, cuando Sudáfrica suele importar del hemisferio norte.
Pirie señala que plantar aguacates en la zona conlleva riesgos conocidos. "Este año sentiremos en nuestros bolsillos las consecuencias de ese riesgo calculado, pero algunos años nos beneficiamos de una ventana de comercialización favorable. Hemos tenido tres años muy buenos. Es la naturaleza de la agricultura". Recuerda que plantó los primeros aguacates de la zona en 1982, sin que sobreviviera ninguno, y que utilizó esa experiencia para orientar las plantaciones posteriores en los años 90, que dieron mejores resultados.
La familia Pirie comenzó la producción comercial de aguacates en 2012. En asociación con otros agricultores, abastece a una cadena local de supermercados durante los meses en que Sudáfrica suele depender de aguacates importados.
Fuente: African Farming
