Una fuerte tormenta de pedrisco registrada el martes en el llano de Lleida ha destruido por completo 543 hectáreas de frutales, con daños que en muchos casos alcanzan el 100% de la producción. El impacto es especialmente grave porque buena parte de la fruta estaba a punto de ser recolectada.
Se trata de la decimoséptima tormenta de la campaña, que ya acumula miles de hectáreas dañadas en la provincia. "Será un año con el triste récord de temporales, superficie afectada y pérdidas para los productores", advirtió el presidente de Asaja en Catalunya, Pere Roqué.
La conselleria de Agricultura informó de que el temporal cruzó el llano de norte a sur, afectando principalmente a zonas del Segrià y la Noguera. En algunos puntos, las rachas de viento y el granizo provocaron la caída masiva de peras, justo al inicio de la recolección de la variedad Conference, muy sensible a los roces y golpes. El pedrisco, en su mayoría mezclado con agua, se concentró en municipios como Torrefarrera, Lleida, Alpicat, Rosselló, Torre-serona y Corbins, muchos de ellos ya golpeados por tormentas anteriores.
Según Roqué, el granizo tuvo, por lo general, el tamaño de un garbanzo, aunque en algunas zonas se registraron piezas de hasta dos centímetros, según mediciones de la Asociación de Defensa Vegetal Terres de Ponent. La lluvia abundante evitó que las pérdidas fuesen aún mayores. Los cultivos más perjudicados incluyen fruta de hueso —melocotones y nectarinas— y de pepita —manzanas y peras—, en su mayoría listos para cosechar.
El balance provisional de Agricultura sitúa los daños más severos en L'Horta de Lleida, con 228 hectáreas y pérdidas de entre el 60% y el 100%. En Torrefarrera, 95 hectáreas presentan el mismo rango de afectación, mientras que en Corbins se calculan daños de entre el 60% y el 90% en 185 hectáreas. En Torre-serona, las pérdidas se estiman entre el 40% y el 60% en 35 hectáreas.
La mayoría de agricultores afectados cuenta con seguro agrario y ya ha iniciado los trámites ante Agroseguro, que realizará peritajes en los próximos días.
Pese a los daños, la recolección de pera Conference ha comenzado esta semana en Lleida con buenas expectativas de calibre y calidad. La conselleria de Agricultura y Afrucat prevén una producción de 52.850 toneladas, un 90% más que el año pasado, cuando la cosecha fue mínima.
Jaume Gardeñes, responsable de Sectores Vegetales de la Unió de Pagesos, confía en que se mantengan los precios del año pasado, favorecidos por la caída de producción en Europa.
Fuente: segre.com