Un exportador sudafricano que abastece a Oriente Medio y al subcontinente indio se muestra escéptico ante el relato, tantas veces repetido, de que los mercados de cítricos del hemisferio norte estaban completamente vacíos al comienzo de la temporada citrícola sudafricana, pues, según manifiesta, resultó ser una ilusión.
"En nuestros mercados, se suponía que Egipto terminaba en junio en lugar de septiembre, que es cuando suele terminar. Y luego, después de todo eso, no terminó hasta agosto, así que hubo mucha desinformación", asegura el exportador bajo condición de anonimato. "Mucha gente esperaba que la historia fuera cierta, pero no lo fue".
Así que ahora, dice, en Oriente Medio, en la India y en Bangladés, los precios de los cítricos están "más o menos en el punto más bajo en que pueden estar. Es algo que nos preocupa mucho a todos y la verdad es que vemos que los mercados ya están sobrecargados de todo: easy-peelers, naranjas, limones. Cuando nos enteramos del aumento de los aranceles por parte de Estados Unidos, supimos que nuestros mercados se iban a sobrecargar de fruta. Y eso es exactamente lo que ocurrió. Oriente Medio se lleva, por lo general, entre el 20 y el 25% de las naranjas y las easy-peelers y el 50% de los limones. Cuando pasa algo con el resto del mundo, se convierte en una especie de vertedero. Eso es a lo que nos enfrentamos este año".
A los productores de cítricos del Cabo Occidental, muy expuestos a Estados Unidos, se les ha dado la espalda tras años de acceso libre de aranceles.
© Carolize Jansen | FreshPlaza.es Plantaciones de cítricos en Citrusdal, Cabo Occidental.
"Si nos fijamos en los mercados de Oriente Medio y la India", prosigue el exportador, "ya nos ha resultado difícil desde 2022, porque fue entonces cuando Ucrania fue invadida. En consecuencia, el transporte marítimo se puso muy difícil en el Mediterráneo. Desde octubre de 2023, la confianza de los importadores de Oriente Medio ha sufrido un duro golpe debido a la guerra entre Israel y Gaza. Los compradores se han vuelto mucho más conservadores".
El transporte marítimo a los puertos de Jeddah, en Arabia Saudí, y Aqaba, en Jordania, se ha complicado mucho, y el resultado son cuellos de botella en los puertos de Dubái, Dammam, Catar y Baréin. "Aunque, en realidad", señala, "los puertos sudafricanos no están funcionando del todo mal este año".
"El sector alimentario no pasa por su mejor momento"
Los observadores del sector citrícola sudafricano habrán notado el gran salto en su estimación de exportación: 171,1 millones de cajas de 15 kg son ahora 189,7 millones de cajas. "En el frente de la estimación del productor, ha habido un poco de desorden este año", afirma el exportador. Es un elemento más de perplejidad en una temporada de la que, observa, "no podemos sacar nada en claro".
Sus temores son de sobra compartidos en el sector citrícola, alimentados no solo por la expansión de los cítricos sudafricanos, sino también por la de Egipto y China. "El sector está impulsando este crecimiento masivo, y yo estoy intentando averiguar dónde vamos a vender toda esa fruta. El consumo de cítricos en el verano boreal no da abasto, y eso es lo que me preocupa", confiesa un exportador centrado en Extremo Oriente. "La plantación de mandarinas y limones tardíos ha sido una locura. Los productores más grandes pueden soportarlo, pero los más pequeños van a pasar apuros cuando el mercado toque fondo", se inquieta.
"No creo que Sudáfrica haya entendido las consecuencias de su 260 Vision [la estrategia del sector para exportar 260 millones de cajas en 2032] ni hacia dónde va a ir, especialmente con Estados Unidos, especialmente con todos estos problemas por todas partes. Es una temporada muy, muy difícil, y todo el mundo está perdiendo dinero. El sector alimentario no pasa por su mejor momento".