La temporada pasada, las exportaciones de mangos malienses a la Unión Europea se caracterizaron por un volumen constante, superior al de otros orígenes de África occidental. Sin embargo, hubo un número importante de interceptaciones y alertas fitosanitarias, que superaron los cincuenta envíos. En respuesta, la Unión Europea prohibió temporalmente todas las importaciones de mango de Malí.
El Ministerio de Agricultura maliense ha convocado una reunión de las partes interesadas, incluidas las autoridades de seguridad alimentaria, los socios técnicos y los productores, para hoy, 24 de septiembre, para presentar un plan de acción largo y completo. Según Naman Keita, productor-exportador y director general de Agroplus Mali, el plan es un paso en la buena dirección, pero llega muy tarde.
© Naman
Según Keita, la causa directa de las interceptaciones es el fenómeno de la mosca de la fruta, que se produjo a principios de la temporada pasada debido a la llegada temprana de la estación lluviosa. "Las interceptaciones de envíos comenzaron en Europa justo al principio de la temporada de mango Kent. Hay que decir que ha habido un retraso significativo de casi diez años en el tratamiento de las fincas. Esta vulnerabilidad a las moscas de la fruta se hizo evidente la temporada pasada", reconoce Keita.
Los ecos de una reunión preliminar a la que asistieron los productores sugieren que la interceptación de mangos malienses fue recibida con silencio en Malí, lo que llevó a la Unión Europea a proceder con la medida radical de una prohibición total. Keita confirma: "Hubo falta de receptividad y comunicación por parte de las autoridades de control de Malí, así como de la interprofesional de productores y otros agentes del sector. Fue necesario responder y dar explicaciones a nuestros socios europeos en cuanto se emitió la primera alerta, como se había hecho anteriormente. En 2016, por ejemplo, las autoridades malienses reaccionaron rápidamente a la primera alerta, lo que ayudó a preservar la reputación de los mangos malienses y garantizar la continuación de la campaña de exportación".
Debido a la insuficiente comunicación de la parte maliense, las autoridades europeas de seguridad alimentaria sobreestimaron los daños fitosanitarios, según Keita. "El número de interceptaciones y alertas, en torno a 63 casos, no es representativo y está sobreestimado. Tenemos dudas sobre el método de recuento porque incluye mangos incautados a particulares que los transportaban en su equipaje personal fuera del sistema de exportación. A este respecto, no creo que la Unión Europea se haya mostrado indulgente".
Este grave incidente podría dañar la reputación del origen maliense en otros mercados, como Marruecos. Keita, que exporta principalmente al mercado marroquí, asegura: "Naturalmente, esto minará la confianza de los importadores y las autoridades de otros mercados, pero quiero dejar claro que los mangos exportados a Marruecos se cosechan muy al principio de la temporada, antes de que lleguen las lluvias, y son de la variedad Amélie, que se cosecha mucho antes que la variedad Kent, objeto de las interceptaciones europeas. Una vez más, nuestras autoridades deben hacer lo necesario para tranquilizar a nuestros socios marroquíes".
Según Keita, el plan de acción encargado por el Ministerio de Agricultura maliense, que abarca un amplio abanico de medidas para un periodo de 12 meses, constituye una hoja de ruta fundamental para volver a entrar en el mercado europeo. El plan incluye la actualización del plan nacional de vigilancia de la mosca de la fruta, la evaluación del seguimiento y el tratamiento de datos sobre Bactrocera dorsalis (plagas de cuarentena prioritarias para la UE) y Ceratitis capitata, y el refuerzo de la comunicación, la cooperación y la colaboración en el sector del mango. Keita comenta: "Esperamos que este episodio quede atrás lo antes posible. La aplicación del plan de acción ya ha comenzado, pero las pruebas a gran escala sin duda llevarán su tiempo".
En cuanto a la necesidad de reestructurar la interprofesional del mango en Malí, una petición fundamental apoyada por productores y exportadores, Keita responde: "Esta es una de las necesidades más urgentes que han surgido de esta crisis. Debemos revitalizar esta importante organización y dotarla de los mecanismos necesarios para la gestión colectiva y eficaz del sector y la gestión de las alertas y quejas de nuestros socios".
"Sigo siendo optimista en cuanto a la rápida reestructuración del sector y la corrección de esta situación. Esto es importante tanto para las exportaciones malienses como para el mercado europeo, donde el origen de los mangos es importante en términos de volúmenes anuales", concluye Keita.
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Naman Keita
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