Durante la semana 50, el mercado viró hacia las cerezas chilenas transportadas por vía marítima. Los operadores señalaron que, debido al volumen limitado de cerezas llegadas por vía aérea y a la notable ventaja de precio del transporte marítimo, la mayoría optó por comercializar fruta llegada por barco. La mayor parte de las partidas marítimas correspondió a la variedad Santina.
Las cerezas transportadas por vía marítima presentaron un amplio abanico de precios. En el caso de la variedad Santina, el formato 2,5 kg × 2 (dos en uno) se situó entre más de 300 ¥ y más de 400 ¥ por caja (41,70-55,60 dólares), con envíos de mayor calidad en torno a 450-470 ¥ por caja (62,50-65,30 dólares), mientras que algunas partidas se vendieron a solo 330-360 ¥ por caja (45,80-50,00 dólares). En cajas pequeñas de 2,5 kg, los calibres 3J se cotizaron aproximadamente a 220-230 ¥ por caja (30,60–31,90 dólares) y los 2J en torno a 190-195 ¥ por caja (26,40-27,10 dólares).

Cerezas chilenas transportadas por vía marítima.
Los comerciantes indican que los precios de las cerezas marítimas mostraron en la mencionada semana un patrón de niveles más altos al inicio y más bajos hacia el final. A medida que aumentaron las llegadas, los precios descendieron gradualmente en la segunda mitad de la semana. Tomando como ejemplo el formato dos en uno, las diferencias alcanzaron aproximadamente 10-40 ¥ por caja (1,40-5,60 dólares). Algunos operadores añadieron que determinadas partidas se ofrecieron a precios inferiores debido a una firmeza y un sabor por debajo de lo esperado.

Izquierda: arándanos peruanos. Derecha: nectarinas australianas de carne blanca.
Durante la semana 50, las llegadas de arándanos peruanos continuaron disminuyendo, mientras que los precios siguieron al alza. Los arándanos de 14 mm o más se situaron en torno a 100 ¥ por caja (13,90 dólares), y los de 18 mm o más en 120-130 ¥ por caja (16,70-18,10 dólares), lo que representó un aumento aproximado del 10% respecto a la semana anterior. Algunos operadores atribuyeron esta subida principalmente a la reducción de los volúmenes de entrada, a una oferta más ajustada de determinadas marcas de alta calidad y a los elevados precios de los arándanos de Yunnan, que actuaron como soporte del mercado.

Arándanos de Yunnan en diferentes formatos.
En el caso de los arándanos de Yunnan, los precios de los calibres 15 mm y 18 mm se mantuvieron relativamente estables. Sin embargo, el formato premium, con fruta extragrande de 24 mm o más, registró un aumento de alrededor del 10%-15% debido a la escasez de oferta. En comparación con la semana anterior, durante la semana 50 llegaron pequeños volúmenes de calibres de 20 mm y superiores, aunque el suministro global siguió siendo limitado.

Izquierda: aguacates peruanos. Derecha: durián vietnamita Kanyao.
Las llegadas de durián aumentaron durante la semana 50, pero la debilidad de las ventas en los tramos posteriores de la cadena llevó a los compradores a reducir tanto la frecuencia como el volumen de sus compras, lo que provocó descensos de precios. Por ejemplo, el durián vietnamita Kanyao (calibre A3) se situó en torno a 230-250 ¥ por caja (31,90-34,70 dólares), una caída pronunciada frente a los más de 300 ¥ por caja (41,70 dólares) registrados en la segunda mitad de la semana previa.
También aumentaron las llegadas de aguacate peruano, con precios para el envasado en caja de cartón en torno a 85 ¥ por caja (11,80 dólares).

Diferentes variedades de manzanas chinas.

Izquierda: Kumquat Crisp Honey. Derecha: piña Golden Diamond de Hainan.
En cuanto a la fruta de producción nacional, durante la semana 50 el mercado ofreció una amplia variedad. Además de grandes volúmenes de cítricos y cajas regalo de manzana, estuvieron disponibles fresas, kumquat Crisp Honey, chirimoyas de Yunnan y muchas otras variedades. Asimismo, entró en el mercado una pequeña cantidad de piña Golden Diamond de Hainan, con precios de aproximadamente 90-95 ¥ por caja (12,50-13,20 dólares). Los comerciantes que trabajaron con distintas frutas nacionales señalaron que, pese a la diversidad de la oferta, las ventas en general se mantuvieron lentas, aunque se esperaba que el ambiente de compra mejorara el mes siguiente.