El seísmo ha tenido efectos reducidos sobre la producción frutícola de la región. “El temblor se produjo a unos cien kilómetros al noroeste de Iquique y a unos buenos mil kilómetros al norte de la región productora más septentrional de Chile (Copiapó). Además, en esa zona, la cosecha ya se ha producido. No esperamos que esto influya en nuestra temporada de la fruta. Chile es un país fuerte y, como tal, puede hacer frente a un seísmo fuerte”, asegura el importador neerlandés Jan Marc Schulz, de SFI Rotterdam. “No he hablado directamente con nadie, pero este es mi razonamiento basándome en la ubicación y en mi experiencia”.
Daan van der Kooij, de Jokofruit, lo confirma: “De esta zona no procede fruta destinada a Europa, en el interior es más bien una zona desértica. Podría influir más en los puertos sureños de Perú, pero parece que no hay ningún problema. Los puertos que exportan fruta a Europa desde Chile son Santiago y otros de más al sur. El país mide 4.400 kilómetros de largo y Santiago está a medio camino”.
Dennis Bartels, de Fruto del Campo, explica que ha hablado con algunos chilenos y que el daño ha sido limitado. “Parece ser una zona en la que no viven muchas personas y donde hay poca producción. No obstante, hay puertos en la zona afectada, pero no me han podido decir mucho sobre si realmente hay daños causados por el terremoto”.
Andrés Ramírez, de Capespan, dice que, según sus colegas chilenos, el seísmo es menos grave que el de 2010. Se han detectado algunos “movimientos” a nivel del mar, por lo que es posible que algunas partes de la costa se vean afectadas. Los valles centrales de Ovalle, San Felipe, Santiago y las zonas meridionales ni siquiera han sentido el terremoto. En cuanto a la fruta, esperamos poco impacto. Posiblemente, se producirán algunos retrasos en el suministro de contenedores, pues los puertos se mantendrán cerrados hasta que se levante la alerta de tsunami”.
Chile está situado en lo que los geólogos llaman “el cinturón de fuego del Pacífico”. La actividad en la corteza terrestre es particularmente intensa en este cinturón. En febrero de 2010, el país fue azotado por un seísmo de magnitud 8,8 en la escala de Richter, seguido por un tsunami. Entonces, hubo más de quinientas muertes.