El aumento del consumo en China está provocado por el continuado crecimiento económico y el aumento de la urbanización. Se espera que la economía china crezca entre un 6-7% anual en los próximos años, lo que llevará a unos 38 millones de hogares más a la clase media-alta. Los alimentos frescos o perecederos llegan a los consumidores chinos cada vez más a través de canales de distribución modernos, como supermercados, hipermercados y tiendas online. La seguridad alimentaria es una de las fuerzas impulsoras que alejan a los compradores de los tradicionales mercados húmedos y se espera que siga siendo una de las grandes preocupaciones de la población china.
La demanda de alimentos frescos y seguros, comprados a través de medios modernos de conveniencia, está impulsando la inversión del país en las infraestructuras de la cadena fría. Durante los últimos cinco años, la capacidad de almacenamiento ha aumentado de los 12 millones de m³ de 2007 a los casi 100 millones de m³ de 2015.
Sin embargo, el sector de la cadena fría en China todavía está bastante atrasado y necesita mejorar tanto en calidad como en capacidad. Las inversiones necesarias son grandes: según las estimaciones se necesitan 85.000 millones de dólares en los próximos diez años. El sector de la cadena fría del país será capaz de mejorar una vez que las compañías de la cadena fría empiecen a adaptar sus modelos de negocios para adoptar estrategias de mayor valor en respuesta a las mayores necesidades de servicios de sus clientes. Los beneficios para China de un sector de la cadena fría mejorado apenas se pueden sobreestimar. La presencia de una cadena fría de mayor nivel:
- reduciría el desperdicio de perecederos en un 14%, lo que supondría un ahorro de 7.500 millones de dólares;
- causaría una descenso del 10% en los precios de los alimentos y reduciría el hambre: los ingresos rurales también aumentarían con el transporte de las cosechas en camiones refrigerados;
- reduciría los costes de sanidad: la mejora de la cadena refrigerada reduciría los 90 millones de casos registrados anuales de intoxicaciones alimentarias.
- supondría entre un 10-20% de reducción de las emisiones: las tecnologías eficientes energéticamente y los nuevos refrigerantes pueden reducir las emisiones tanto de vehículos como de almacenes.