Con una visita en terreno realizada por FEDEFRUTA a predios y packing de la Exportadora de Mifruta, empresa apoyada por CORFO a través del Programa de Fomento Asociativo (PROFO), se dio inicio a temporada de cosecha de la variedad Iniagrape-One 2017, en las comunas de San Esteban y Santa María.
Esta variedad fue desarrollada por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) en conjunto con el Consorcio Biofrutales con el objeto de obtener una variedad que respondiera a las actuales necesidades de Chile como país exportador de uva de mesa. Sus características son su color negro, su forma redonda levemente alargada, de buen calibre, dulce sabor con alto contenido en pruina (cera que cubre la baya) y larga vida poscosecha. La variedad se adapta a las condiciones climáticas de las zonas productivas del país y cuenta con una interesante proyección internacional.
Luego de visitar parrones de la variedad se concurrió al packing de MiFruta, empresa exportadora cuyos socios son productores de las provincias de San Felipe y Los Andes, quienes con el apoyo de CORFO se juntaron para exportar directamente sus productos a los exigentes mercados de Estados Unidos, Inglaterra y China, entre otros, a través de las redes de comercio justo. Así, los productores de MiFruta han aprovechado la oportunidad y han invertido en la variedad Iniagrape-One, quedando muy conformes con la calidad de la fruta obtenida y las facilidades de manejo en su proceso productivo.
Rodrigo Cruzat, gerente del Consorcio Biofrutales, quien participó de la actividad, comenta que, debido al éxito de Iniagrape-One, se está trabajando en nuevas variedades que permitan mantener la competitividad de la industria nacional en los mercados internacionales de uva de mesa, así como también en otros frutales.
Guillermo Nieto, productor de la comuna de San Esteban y socio de MiFruta, destacó la precocidad de la variedad lo cual permite tener retornos de inversión menores a nivel de huerto
El trabajo colaborativo de las diferentes instituciones públicas y privadas, más la indispensable labor de los agricultores, ha permitido el desarrollo de una variedad que potencia la competitividad de la fruticultura nacional y consolida la confianza de las redes de comercialización internacional en los productores de Chile.
Fuente: Comunicaciones Fedefruta
