La única preocupación que tienen es para finales de año, noviembre o diciembre, debido a la previsión de lluvias que puedan no tener. “Durante los últimos cinco años hemos sufrido muchas sequías que han afectado a la producción y la han reducido considerablemente”, explica Altamir Martins, de la empresa Finobrasa Agroindustrial S.A. Además, las sequías afectan a las reservas de agua en los embalses que se destinan al riego de los cultivos. Asimismo, este año las lluvias fueron escasas y no bastaron para recuperar los niveles de agua necesarios.
Ahora, las últimas informaciones estiman que tendrán que recoger y usar el agua de los embalses como medida extrema. Por el momento, no se puede medir cómo afectará esta situación a los volúmenes para finales de año. En cuanto al uso del agua, no se sabe si el gobierno o las autoridades establecerán ciertos controles o sistemas para reducir el consumo de agua en los diferentes proyectos existentes.
Sin embargo, la calidad es muy buena debido a que han tenido una buena floración en general y con pocas lluvias. La temporada empezará a finales de julio o principios de agosto, alcanzará su pico de producción en octubre y continuará hasta diciembre. A pesar del problema del agua, se observa la misma curva de producción y se espera una temporada tan larga como en los últimos dos años.
Debido a que México envía muy pocos mangos a Europa y casi todo lo destina a Estados Unidos, sí que notan cierta competencia en el mercado estadounidense y poca competencia en el mercado europeo. El año pasado tuvieron algunos problemas en el mercado de final de agosto y todo el mes de septiembre, aunque este año no tienen suficiente información para saber si estos problemas se repetirán, pero esperan empezar en agosto y se estima que, desde septiembre, el mercado se abastecerá únicamente de mangos brasileños.
Ambos mercados, el estadounidense y el europeo, son importantes para Brasil. Sin embargo, las ventanas que hay para poder operar en ambos mercados son muy diferentes. Casi cada semana Brasil envía cargas de mangos hacia Europa, lo que supone casi el 70% del volumen total. Sin embargo, Estados Unidos tiene una ventana muy pequeña porque cuando se detienen los envíos mexicanos, los ecuatorianos están a punto de llegar y empezar sus ventas en octubre. Esto deja una ventana de apenas dos meses para los brasileños, aunque a estos les merece la pena, puesto que es un mercado muy atractivo y la calidad del mango brasileño es excepcional, lo que refuerza su reputación.
Para más información:
Altamir G. Martins
Director de Operaciones
FINOBRASA AGROINDUSTRIAL S.A
Grupo Vicunha
T: +55 84 3335-2216
E: altamir@finoagro.com.br
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