Por desgracia, estas bananas tienen un bajo contenido de vitamina A y hierro, lo que significa que las dietas basadas en las bananas son deficientes en estos micronutrientes, lo cual se traduce en una nutrición inadecuada. Entre los problemas que ello conlleva, está un alto nivel de deficiencia de vitamina A, anemia y retraso del crecimiento en niños.
En 2005 se puso en marcha un proyecto conocido como Banana21 para reducir las deficiencias de micronutrientes en Uganda y países vecinos mediante la creación de unas bananas comestibles con un mayor nivel de almidón y hierro. Para ello, se recurrió a la modificación genética.
(A) Bananas Cavendish biofortificadas por vitamina A probadas en Australia; (B) Banana Nakitembe EAHB biofortificada (izda.) y banana de control (dcha.) en los experimentos de Uganda.
Los tecnólogos de la Universidad de Queensland (Australia) y la Organización Nacional de Investigación Agrícola de Kampala (Uganda) han publicado un estudio sobre el componente de biofortificación de almidón en el proyecto Banana21, sobre los estudios realizados en Australia, la transferencia de la tecnología a los colegas ugandeses y su puesta en marcha en Uganda. También se abordan los retos y los potenciales obstáculos futuros.
En esta zona, las bananas son importantes a nivel cultural y de seguridad alimentaria. En combinación con una distribución a bajo coste y gestionada por los productores, estas bananas Golden podrían ser una estrategia eficaz para reducir los problemas relacionados con la deficiencia de vitamina A en la próxima década.
Fuente: Jean-Yves Paul, Robert Harding, Wilberforce Tushemereirwe, James Dale, 'Banana21: From Gene Discovery to Deregulated Golden Bananas', 2018, Frontiers in Plant Science.