A medida que la producción de mandarina en California comienza a disminuir, los envíos de fruta israelí empiezan a llegar a la costa este para el mercado estadounidense.
La principal mandarina que se exporta de Israel es la Orri, un híbrido desarrollado específicamente para mantener el sabor y la integridad durante la cadena de suministro internacional. Los primeros contenedores de la temporada llegaron a Filadelfia a finales de enero, a la importadora y mayorista de productos especiales John Vena Inc. (JVI).
"Estamos muy satisfechos con la calidad de nuestros primeros contenedores. La fruta ya se consume mejor que cualquier otro cítrico, y llevo trabajando con Orri en particular durante algunos años, más o menos desde que la popularidad de la variedad comenzó a extenderse desde Europa”, informa el presidente de JVI, John Vena. "Hemos recibido informes que indican un Brix de 14 grados. Afortunadamente para cualquier amante de los cítricos, se predice que los envíos continuarán hasta mayo".
Este año ha sido particularmente inusual para los miembros del socio agricultor de JVI, Granot, una cooperativa de 45 kibbutzim agrícolas, con raíces desde principios de los años cuarenta. Según la empresa, la fruta en todo el país maduró mucho más rápido de lo previsto, lo que llevó a una buena oferta de fruta grande al principio de la temporada. La cooperativa envasó fruta a mediados de diciembre, varias semanas antes de las previsiones estimadas, y la producción registró volúmenes récord de tamaños más grandes con volúmenes reducidos de frutas medianas y pequeñas, a diferencia de la campana de Gauss que suele caracterizar la cosecha.
A pesar del comienzo atípico, los productores esperan una producción de Orri particularmente fuerte para 2019 con volúmenes constantes y excelente calidad. La fruta más pequeña ya ha comenzado a llegar y se espera que las proporciones se normalicen en las próximas semanas, aunque se anticipa que la fruta grande envasada en cajas de 10 kilogramos a granel, convenientes para los retailers étnicos, seguirá siendo abundante en la temporada.
Con el aumento de los volúmenes más pequeños, JVI ha lanzado una bolsa de Orri que según la empresa ofrece a los retailers más flexibilidad para la comercialización. El producto se envasa y se clasifica en Filadelfia. Además, la malla transpirable de la bolsa maximiza la vida útil y es un excelente complemento para la fruta a granel, según JVI.
La Orri es una mandarina destinada a ser comercializada junto a las clementinas de marca u otras variedades de mandarinas especializadas, como la Tango. Según Emily Kohlhas, directora de marketing de JVI. “El sabor afrutado de la Orri es realmente insuperable. Si buscas un cítrico superdulce y apetitoso por un poco más, es tu mandarina perfecta".
Emily recomienda ofrecer degustaciones de Orri durante al menos dos semanas al inicio del programa. “Incluso ofrecer una fruta gratis para los niños que compran con sus padres, y un pequeño stand de compra puede ser una buena herramienta para que la Orri sea favorita. ¡Un bocado y la fruta se vende sola!
En el segmento food service, Emily informa que los restaurantes mediterráneos, israelíes o libaneses pueden sentirse especialmente atraídos por la Orri debido a su procedencia. "Más allá del origen, sus gajos aguantan bien en ensaladas o platos sabrosos, mientras que su potente dulzura y su atrevido sabor a mandarina no convencional no se pierden cuando se hace zumo y se usa en vinagretas o marinadas", agrega. "Para los cócteles, es mejor la variedad Ora, que puede suponer un ahorro de costes pero aporta el mismo sabor".
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Emily Kohlhas
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