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Italia: CREA destaca los beneficios de las moléculas de las frutas y hortalizas moradas

La comunidad científica está de acuerdo en reconocer la importancia del intestino y de su microbiota para mantener el estado general de salud. Por primera vez, el Consejo para la Investigación en Agricultura y el Análisis de la Economía Agraria, el CREA, con su centro de investigación de Alimentos y Nutrición, se ha centrado en el efecto beneficioso de las antianocianidinas, un tipo particular de flavonoides típicos de las frutas y hortalizas de color morado, sobre las disfunciones intestinales.

Los flavonoides, moléculas bioactivas naturales que se encuentran en grandes cantidades en el mundo vegetal, son de hecho particularmente conocidos y apreciados por sus propiedades saludables y por contribuir a la prevención de numerosas enfermedades, como las cardiovasculares, inflamatorias e incluso algunos tipos de cáncer.

Las disfunciones intestinales se manifiestan de diferentes maneras y con diferentes intensidades, que van desde la alteración de la barrera intestinal que impide la entrada de toxinas y bacterias, hasta verdaderas inflamaciones que tienen repercusiones negativas en todo el organismo. Por lo tanto, comprender cómo funcionan los mecanismos moleculares que regulan los procesos de protección del intestino es fundamental para el desarrollo de estrategias eficaces de prevención y tratamiento. Tales disfunciones se asocian a menudo con condiciones de sobrepeso y obesidad.

Concretamente, el estudio, publicado en la revista internacional Molecular Nutrition and Food Research, consistió en insertar en la alimentación de animales experimentales (ratones), divididos en grupos, dos dosis diferentes de proantocianidinas extraídas de semillas de uva para simular una ingesta de carácter "nutricional" (75 mg) frente a una "farmacológica" (375 mg) durante 15 días. Al final de este período, en los siguientes 5 días, se administró una dosis diaria de LPS, un componente de las paredes bacterianas que induce una inflamación específica en el intestino. Al final del tratamiento, se tomaron muestras de sangre e intestino y fue posible observar que las dosis, la nutricional y la farmacológica, habían protegido al intestino del daño causado por el LPS, modificando positivamente la expresión de los genes implicados en la respuesta antiinflamatoria.

"Este estudio indica que la ingesta regular de proantocianidinas puede contribuir a la prevención de disfunciones inflamatorias intestinales, gracias a la capacidad de modular positivamente la respuesta celular y tisular frente a los agentes tóxicos, protegiendo sus funciones esenciales para mantener la salud del cuerpo en general. Este estudio confirma la importancia de las moléculas características de la dieta mediterránea en la construcción de una alimentación funcional para la salud humana", comenta la investigadora del CREA Raffella Comitato, coautora del estudio junto con el investigador principal Fabio Virgili.

Fecha de publicación: