Cuando termine la temporada de fresas, estará cada vez más cerca la próxima temporada, por lo que los productores pronto tendrán que comenzar a preparar el cultivo de la siguiente campaña. Para optimizar las condiciones de cultivo, la compañía Heinrich GLAESER ofrece en su gama de productos un tipo de acolchado plástico para (entre otras cosas) el cultivo de fresas. Stephan Kohn, director de la división GLAESERgrow, explica: "El acolchado plástico se usa para evitar que crezca la maleza, reduciendo de esta manera significativamente el uso de herbicidas y optimizando el crecimiento de las plantas: el calor y la humedad se pueden almacenar mejor en el suelo, lo que aumenta los rendimientos".
Kohn continúa: "Nuestros acolchados plásticos están disponibles en diferentes versiones, como lámina mono o de estructura multicapa, así como en diferentes colores: negro, blanco/negro o plata/negro. La lámina negra se puede utilizar para acortar la cosecha, mientras que la blanca/negra retrasa la cosecha, brindando también una mejor protección contra las malezas y teniendo un efecto positivo en el color de los frutos". Para el cultivo de fresas, Kohn generalmente recomienda un grosor de 40 μm para un año o 50 μm para cultivos de dos años. "El aspecto más importante aquí, sin embargo, es la alta estabilidad a la radiación UV de las láminas".
También es posible tener las láminas ya perforadas o microperforadas: "Cada productor tiene diferentes demandas. La lámina se puede perforar a mano o con una máquina, y las plántulas se pueden plantar en los agujeros".
Para muchos productores, las láminas biodegradables también tienen una ventaja, tanto para el cultivo como para su eliminación. GLAESERgrow cuenta con una solución para esto, dice Kohn: "La demanda de cubiertas biodegradables está en constante aumento y, naturalmente, nos estamos esforzando por satisfacer esta demanda. La lámina es 100% compostable, por lo que puede incorporarse fácilmente al suelo después de su uso. Está certificada ecológicamente y tiene el mismo efecto de supresión de malezas que la cubierta protectora convencional". Para esta variante, también es posible la perforación o la microperforación. La lámina es soluble en agua y segura para animales y plantas, explica el experto. “La lámina puede durar hasta 20 meses, dependiendo de los requisitos del cliente, pero es compostable. Esto significa que su durabilidad depende en gran medida de los factores ambientales, por lo que actualmente solo recomendamos cubiertas biodegradables para cultivos de un año de duración, y estamos trabajando para extender su vida útil" .
GLAESERgrow ofrece dos productos más para el cultivo este año. "Por un lado, estamos trabajando en mallas para el crecimiento vertical de, por ejemplo, frambuesas, pero también de frutos como los tomates y los pepinos, haciéndolos más uniformes“. Los marcos proporcionan estabilidad a la planta, aumentando la calidad. "Y nos complace especialmente poder presentar a nuestros clientes nuestra nueva lámina de sustrato".
GLAESERgrow es parte del Grupo GLAESER, con sede en la localidad alemana de Ulm, una empresa familiar tradicional que desde 1888 ha estado involucrada en el reciclaje, la producción y el comercio de textiles y plásticos de todo tipo, y que ha seguido evolucionando desde entonces. La compañía ahora da empleo a más de 800 personas en sus diferentes divisiones.
Para más información:
Stephan Kohn
Heinrich GLAESER Nachf. GmbH
Blaubeurer Str. 263
89081 Ulm (Alemania)
Tel.: +49 (0)731 3981-62
E-mail: grow@glaeser-textil-ulm.de
Web: www.glaeser-textil-ulm.de