"El control de la presencia de Halyomorpha halys en los cultivos en la provincia de Turín se realiza a través de 70 trampas de captura masiva. Los técnicos de Coldiretti también llevan a cabo controles en los campos de cultivo de la región para determinar el porcentaje de daño en la cosecha. Hasta ahora los datos promedio proporcionan una cifra preocupante", informa Fabrizio Galliati, presidente de la cooperativa italiana Coldiretti Torino.
"La provincia de Turín y la de Asti registran más del 40% de daños producidos por las chinches en la producción de avellanas, seguidas por la provincia de Alessandria, con un 20-30% del cultivo afectado, y de Cuneo, donde el daño en la cosecha es de 15-20%. Estas cifras son aún más significativas si consideramos la baja producción de este año, debido a la caída de las avellanas en formación, las cuales, afectadas en su primer estadio por las picaduras de los insectos, no se desarrollaron de manera correcta y cayeron finalmente. Los servicios de asistencia técnica todavía se centran en el control cuidadoso para optimizar la estrategia de defensa, ya que la introducción de parásitos específicos, como la avispa samurái, está prohibida por ahora", continúa diciendo Galliati.
"Ante esta situación, consideramos una buena noticia la asignación de 80 millones de euros prevista en la ley de presupuestos a favor de las empresas dañadas, anunciada en los últimos días por la ministra Teresa Bellanova, quien también se comprometió a estudiar la posibilidad de una moratoria en el pago de los préstamos hipotecarios para las empresas afectadas por este parásito", comenta Galliati.
"Estos recursos son un acto de responsabilidad frente una adversidad que se ha extendido por todas las regiones del norte de Italia, causando daños, al igual que en la producción de avellanas, en la de manzanas, peras o kiwis, pero también en la producción de melocotones, cerezas, albaricoques y plantas de viveros. Coldiretti pide que las medidas de emergencia se acompañen de medidas estructurales para superar los retrasos burocráticos en la lucha contra la chinche letal, con la rápida introducción de la avispa samurái, el enemigo natural del insecto oriental", concluye Galliati.