Los primeros albaricoques de la región italiana de Emilia-Romaña llegan al mercado con una semana de anticipación. La demanda fue inmediatamente muy alta para la variedad Pricia, de acuerdo con Cristian Montalti, quien produce albaricoques en las colinas de Imola (Bolonia). Cristian cosechó los primeros frutos el sábado 10 de mayo. "Nunca antes recolectamos tan temprano, pero la temporada actual es anómala en muchos aspectos".
La variedad Pricia
La zona no se vio afectada por las heladas, pero la producción es más baja que la de una cosecha estándar. "Este es un año de alternancia en la producción y la floración no ha sido abundante. Las condiciones meteorológicas no han sido favorables, con temperaturas altas en febrero y luego frías en marzo y principios de abril. Calculo una merma del 60% en comparación con el volumen normal".
Recolección en la empresa Montalti
Sin embargo, este 40% que ha quedado debería estar bien pagado este año. Montalti entrega los albaricoques en una subasta y la primera venta salió bien, a más de 4 €/kg. "Está claro que los precios varían todos los días, y los primeros frutos siempre se valoran bien. Al final de la temporada, creo que la producción bruta vendible no será como en un año normal, pero aun así, la campaña puede ser positiva".
El productor posee 2 hectáreas de albaricoques de diferentes variedades. El calibre de las primeras frutas no es muy alto, pero gracias a las labores de aclareo, se obtendrán buenos tamaños más adelante y, en la subasta, la calidad está bien pagada. "Las subastas penalizan las frutas de mala calidad. Hay que ser meticuloso, especialmente en la manipulación de la fruta".
Michele Montalti
La cosecha comienza con las variedades Wondercot y Pricia. Les seguirán Luna y Rubista y, tras ellas, Orange Ruby y Pincot. "Recolectaremos hasta mediados de junio, ya que no tengo variedades tardías. Como no puedo regar, no podría mantener el alto estándar de calidad", concluye Montalti.
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Cristian Montalti
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