El Banco de la Reserva de Australia (RBA) ha sorprendido al mercado elevando el precio del dinero más de lo esperado, en 50 puntos básicos, hasta el 0,85%, para relajar la presión inflacionista que está viviendo el país.
Y es que a la inflación derivada de los problemas en la cadena de suministro global, provocados primero por la crisis sanitaria y después por la guerra en Ucrania, se han unido otros factores que han generado la escasez ciertos productos y colaborado en disparar los precios, como las inundaciones de principios de año; cabe recordar que las lluvias torrenciales en la costa este del país dieron al traste con gran parte de la cosecha de lechugas en el país.
Como consecuencia, las lechugas tipo Iceberg se están vendiendo a 12 dólares australianos (unos 8 euros), un precio muy elevado que supera con creces el de la sandía, que se vendía a 25 dólares australianos (casi 17 euros) en los estantes de la cadena local de supermercados Woolworths.
En datos de la Oficina de Estadísticas de Australia, 867.000 australianos ahora tienen dos trabajos para hacer frente al aumento de los precios. Se trata del nivel más alto desde antes de 1994, cuando comenzó a realizarse la estadística.
Fuente: eleconomista.es