El conflicto en Europa del Este no solo les está complicando a los fabricantes de alimentos abastecerse de materias primas, sino que también está planteando retos a los exportadores de bananas de Filipinas. Dado que Rusia ha cerrado sus fronteras tras invadir Ucrania, los vendedores de bananas, en particular de América Latina, se han visto obligados a buscar otros compradores en el mundo, en mercados donde Filipinas solía tener una posición dominante.
Aunque Filipinas sigue siendo el segundo mayor exportador de bananas del mundo, otros competidores le están pisando los talones y amenazan con desbancar al país de su estatus actual. Mantener este estatus es la lucha por retener su cuota de mercado en medio de los retos que enfrenta el sector. El impacto de una menor cuota de mercado la notarían principalmente los productores locales que tienen dificultades para ganar lo suficiente a causa del incremento de los costes de producción y de la aceleración de los precios de los bienes básicos.
Fuente: businessmirror.com.ph