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Cinco grandes cadenas belgas se suman a la iniciativa para garantizar un salario digno a los trabajadores

"Celebramos que haya más conciencia y que haya iniciativas para buscar soluciones a los retos bananeros”

En diciembre del 2022, cinco grandes cadenas belgas se sumaron a la iniciativa que ya pusieron en marcha los retailers Lidl, Aldi Sur y Norte, Kaufland, Rewe, DM y Tegut en Alemania, para garantizar un salario digno a los trabajadores en las plantaciones de bananos.

Así, Colruyt, Delhaize, Aldi, Jumbo y Lidl Bélgica y Luxemburgo se comprometen, hasta el 2027, a salvar la brecha entre el salario real y el que debería percibir un trabajador del banano para hacer frente al costo de la vida.

"Celebramos que haya más conciencia sobre lo que se debe mejorar y que haya iniciativas para buscar soluciones a los retos bananeros”, dice a DW Marike De Peña, que preside la Coordinadora Latinoamericana y del Caribe de Pequeños Productores y Trabajadores de Comercio Justo (CLAC), haciendo alusión no solo a la brecha salarial, sino al conjunto de factores que han llevado a que el banano esté en crisis.

Y es que a factores como la escasez de fertilizantes por la guerra en Ucrania y la pérdida de mercados, a los que se han sumado los cambios climatológicos, el alza de los precios de insumos y transporte, los efectos de la pandemia o la plaga del Fusarium, han hecho que las importaciones de la UE cayeran un 3% en 2022.

Con respecto a la iniciativa, "hemos despertado y sabemos que el problema es conjunto”, comenta la presidenta de CLAC. No obstante, "en esos cálculos no se incluye al pequeño productor. En Fair Trade somos mitad pequeños, mitad grandes”, agrega De Peña, que representa a Fair Trade por América Latina y el Caribe.

Por el momento, siguiendo un instrumento de cálculo desarrollado por GIZ, la agencia de cooperación alemana, se recogen datos para determinar cuál es la brecha. Se trata de analizar los datos de las empresas exportadoras de banano fresco, que tengan más de cinco trabajadores contratados.

"Pero no es que nos falten datos", remarca De Peña. "Sabemos el costo de una producción sostenible que incluye el pago de salarios dignos. Si aumentas el salario y no el precio del banano, ¿no se tendrá aún menos dinero para la producción o para garantizar trabajo decente?”, cuestiona, haciendo alusión al trabajo informal.

 

Fuente: dw.com

Fecha de publicación: