El pasado viernes se registró en Marruecos una temperatura récord de 50,4 ºC. La ola de calor duró varios días y vino acompañada de "chergui", vientos cálidos y secos procedentes del Sáhara, tormentas de arena e incendios forestales. El impacto en la producción agrícola es importante, según fuentes profesionales, pero varía de un cultivo a otro. La mayor preocupación se centra en los tomates y las hortalizas tempranas, cuya producción se concentra en la zona afectada.
Mustapha Aouragh, doctor en agronomía y productor de tomates en la zona de Sus-Masa, declara: "El impacto en los tomates es enorme. La temperatura en el interior de los invernaderos alcanzó los 70 ºC, y zonas enteras quedaron abrasadas. Los productores cuyas plantas estaban en fase de floración perdieron el 100% de sus superficies por las quemaduras del sol. Otros perdieron al menos el 25% de sus volúmenes".
El productor continúa: "Recibimos avisos de la Dirección Nacional de Meteorología y del Ministerio de Agricultura, y no escatimamos esfuerzos ni precauciones para salvar los cultivos, aumentando el riego, activando los aspersores de niebla e instalando mallas de sombra. Todos estos esfuerzos fueron en vano, y nos vimos impotentes mientras nuestros cultivos ardían bajo un calor sin precedentes".
Además de la pérdida de volúmenes y el consiguiente golpe económico, la ola de calor hará que se retrase la temporada de tomate, prevista inicialmente para octubre. Aouragh expresa: "Tenemos que replantar las zonas quemadas, lo que implica una demanda imprevista de semillas e insumos. El retraso podría oscilar entre 20 días y un mes, ya que la mayor parte del volumen de tomate marroquí se produce en la zona afectada".
El retraso también se debe a que varios productores de la zona han empezado a adoptar nuevas semillas resistentes a las enfermedades fitosanitarias, lo que previsiblemente provocará una escasez, según fuentes profesionales.
Aouragh reclama indemnizaciones para los productores que han perdido sus cosechas: "Los costes de producción y las pérdidas son grandes en un sector ya de por sí frágil económicamente. Estamos ante un caso de fuerza mayor, que requiere la intervención del Gobierno para salvar a los productores, especialmente a los más pequeños".
Es la primera vez en la historia que la temperatura en Marruecos supera los 50 ºC. La temperatura récord se registró en la zona de Sus-Masa, una de las principales zonas agrícolas de Marruecos, donde se encuentra gran parte de la producción de tomate, hortalizas tempranas, frutos rojos, fruta de hueso y fruta de temporada del país.
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Aouragh Mustapha
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