El ajo es uno de los condimentos más importantes en China. Desde abril de este año, los precios del ajo han subido en toda China y se han mantenido relativamente altos en el segundo semestre. Los últimos datos del Ministerio de Agricultura muestran que el precio medio del ajo al por mayor en octubre fue de 10,48 yuanes por kilo (1,36 euros); un 2,6% más que en septiembre y un 55,7% más que en octubre de 2022. En Pekín, la subida de precios es aún más notable.
Según algunos comerciantes, las principales zonas productoras obtuvieron una cosecha de récord en mayo del año pasado. La oferta aumentó y el precio bajó, lo que hizo que los agricultores estuvieran menos dispuestos a plantar el pasado otoño, por lo que la superficie se redujo en un 15%. Por otro lado, las grandes oscilaciones térmicas registradas en las zonas productoras del norte el invierno pasado y esta primavera también contribuyeron a reducir el rendimiento del ajo. En consecuencia, tras la llegada del ajo nuevo en mayo de este año, el precio no bajó, sino que subió. Debido al elevado precio, la demanda se vio afectada y el volumen de ventas se redujo considerablemente.
Según se informa, el ajo que se está vendiendo en este momento en el mercado Xinfadi de Pekín procede principalmente de Henan y Jiangsu, y algo de Shandong. El total de ventas diarias en el mercado oscila entre 180 y 200 toneladas, justo la mitad que en el mismo periodo del año pasado.
La cosecha se llevó a cabo en mayo y junio de este año. Tras el proceso de secado, el almacenamiento comenzó en julio y agosto. El precio dobla al del año pasado y se espera que se mantenga alto.
Fuente: CCTV-2
