A pesar de la escasa disponibilidad de naranjas de gran calibre, hasta ahora ha habido una oferta suficiente de cítricos españoles para satisfacer la demanda. "En ese sentido, la temporada de este año ha comenzado bien para nosotros", informa Stefan Lindner, importador de frutas y director general de la empresa familiar del mismo nombre con sede en el Frankfurter Frischezentrum. "En general, debido al tiempo durante los últimos meses, las naranjas españolas no son tan redondas como de costumbre. Tienen una forma un poco más alargada de lo habitual, lo cual no es óptimo. Además, debido a las altas temperaturas, al principio tenían un color muy claro, aunque en ese sentido ya hemos observado una gran mejoría".
El tema de la disponibilidad de agua sigue siendo un asunto relevante en las zonas de España donde se cultivan cítricos. "Si el otoño es demasiado seco, los frutos no crecen tanto. Sobre todo al principio de la temporada ha habido muy pocos calibres 1 y 1/2 disponibles", señala.
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Las lluvias puntuales, como las registradas en diciembre, son buenas para los calibres, pero también aumentan la sensibilidad al moho de la cosecha actual. "Para los productos con los que no se usamos fungicidas ni conservantes, como nuestras naranjas de la marca premium Diana, esto es contraproducente. Por lo tanto, puede que haya escasez de producto en algunos momentos, ya que no cargamos fruta cuando llueve. De esa manera, nos aseguramos de proteger las cualidades de la piel". Lo mismo se aplica a las clementinas que se distribuyen bajo su marca propia, añade.

La temporada 22/23 también fue difícil para Diana debido a la lluvia (FreshPlaza.es informó de ello), continúa Lindner. Sin embargo, se registró una buena demanda, incluso en el sur de Alemania. Lo crucial no es solo el tiempo en el lugar de origen, sino también en Alemania. "Unas temperaturas ligeramente por encima de los 0 grados son ideales para nosotros, ya que entonces la demanda de cítricos suele aumentar".
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La dirección de la empresa Lindner con Stefan Lindner (izquierda).
Unas condiciones así son también ideales para el comercio especializado, sobre todo para el comercio ambulante en los mercados semanales. "Porque en este caso no hay hielo ni nieve que mantenga a los clientes en casa y la mercancía no sufre daños por heladas. Por lo tanto, espero con optimismo la campaña de ventas navideña y el resto de la temporada", concluye Lindner.
Fotos: Lindner GmbH
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