Este año, la excepcional temporada de setas que ha tenido Estonia ha provocado una importante caída de los precios de los rebozuelos.
Según Ainu Palover, que compra estos populares hongos al por mayor en los condados de Võru y Põlva, hace ocho años se produjo una situación similar.
La abundancia de rebozuelos en los bosques ha provocado un desplome de los precios, que han pasado de 10 euros por kilogramo en junio a 2 euros en agosto.
El fuerte descenso de los precios se debe en parte a que una gran proporción de estas setas se exporta. Estonia se enfrenta a la competencia de Letonia y Lituania en el mercado de exportación. En estos países, los precios al por mayor son aún más bajos, apenas 1,30 euros por kilogramo, lo cual les permite vender rebozuelos más baratos que las empresas estonias.
Debido a estos bajos precios, muchos buscadores de setas se preguntan si merece la pena seguir recolectándolas.
Fuente: rus.postimees.ee