Las cerezas dulces, aunque son una incorporación relativamente reciente al panorama agrícola de Sudáfrica, están ganando atención gracias al desarrollo de variedades con menor necesidad de frío. Esta expansión se produce principalmente en la región de Koue Bokkeveld, cerca de Ceres. Recientemente, la Asociación Internacional de Frutales visitó en las instalaciones de Dutoit Agri un campo de cerezos de las variedades Lapins y Royal Helen en la cuarta floración.
Piet Bosman, asesor técnico de Dutoit, subraya la necesidad de que la fruta sea firme para poder prolongar los plazos de transporte, ya que las cerezas de Sudáfrica se destinan principalmente a los mercados de Europa y Oriente Medio. Se exportan aproximadamente 2.600 toneladas, la mitad de la producción actual del país, lo que demuestra que se trata de un sector floreciente, aunque pequeño en comparación con el de Chile, que ocupa una posición dominante.
"En el pasado pagamos el precio de ser demasiado codiciosos por producir demasiadas cerezas por árbol", lo que disminuyó la calidad de la fruta, reconoce Bosman. Ahora lo que se busca es mantener el equilibrio y lograr una salud óptima de los árboles.
Los campos de Dutoit emplean portainjertos MaxMa 16, con más de 1.667 árboles por hectárea, en un sistema de conducción central tabletop, que se distingue por sus niveles independientes de ramas fructíferas. De esta manera se aumenta la integridad estructural y se facilita la cosecha. Los rendimientos preliminares indican un potencial de 16 a 18 toneladas métricas por hectárea para los cultivares tardíos una vez alcanzada la madurez completa.
La eficiencia laboral constituye una ventaja añadida de este sistema, ya que se puede cosechar desde el suelo o desde plataformas. La simplicidad del método de formación ayuda al proceso de regeneración estructural y de las ramas fructíferas, como explica Gys du Toit, director de producción, haciendo hincapié en las técnicas de renovación de las ramas.
Greg Lang, de la Universidad Estatal de Michigan, destaca la adaptabilidad del sistema y señala que "este innovador sistema incorpora una renovación constante", lo que proporciona una distribución ventajosa de la luz y un mayor potencial de rendimiento gracias a la colocación estratégica de los espolones.
El sector cerecero de Sudáfrica, que cuenta con más de 30 productores en más de 700 hectáreas, ha visto duplicarse su superficie en los últimos años. Aunque carece de representación oficial por parte de Hortgro, los esfuerzos de investigación colaborativa se centran en optimizar los cultivares de cereza para los distintos climas del país. Dutoit explora principalmente cultivares de frío bajo a medio, en particular los de la serie Royal de Zaiger Genetics, desarrollando su potencial para una mayor adaptación.
Fuente: GoodFruit Grower