Las ventas de cebollas neozelandesas se han frenado bruscamente en las últimas semanas. "Hasta la segunda semana de junio todo marchaba según lo previsto, con una demanda sólida y operaciones sin sobresaltos. Sin embargo, varios buques sufrieron retrasos justo cuando el mercado atravesaba una fase de escasez de producto", explica Tim van Haandel, de la exportadora holandesa Mulder Onions.
"El problema es que todo ese volumen pendiente llegó de golpe en la semana 26. Como resultado, perdimos dos semanas claves para la exportación, en pleno pico de demanda. Ahora, los importadores se enfrentan a un exceso de stock que antes habrían vendido sin dificultad, pero que actualmente cuesta mucho más colocar", señala Van Haandel.
"Es una lástima, porque el 80% de la campaña se ha desarrollado de forma muy positiva, con precios estables y un mercado receptivo. Incluso podríamos haber alcanzado precios aún más altos, ya que en determinado momento el valor de la cebolla holandesa igualó al del producto neozelandés. Bajo mi punto de vista, aún había margen para mejorar", manifiesta.
© Mulder Onions
Desde hace un par de semanas, Mulder Onions ha iniciado la campaña de la cebolla holandesa. "Muchos intentaron mantener la dinámica del ciclo anterior, lo que hizo que comenzáramos con precios por encima del nivel real del mercado. Ahora las cotizaciones se han moderado: los calibres tipo 3 se mueven entre los 38 y 40 céntimos, los medianos entre 42 y 45, los calibres grandes rondan los 48 céntimos y el calibre extra alcanza los 58", detalla.
"Con la progresiva llegada de más producto al mercado, no creo que veamos una estabilización del mercado en el corto plazo. Hay algo de demanda desde destinos tradicionales como el Reino Unido, el Caribe e incluso algún contenedor se dirige hacia África, pero está lejos de ser un flujo de ventas que permita operar con normalidad a todo el sector", comparte Van Haandel.
Sobre el rendimiento de las cebollas holandesas, Van Haandel subraya el impacto negativo de la sequía: "Las producciones han quedado por debajo de las expectativas. En cuanto a la cebolla de siembra, todavía es demasiado pronto para emitir un juicio fiable sobre los rendimientos", señala el exportador.
Tampoco el panorama en el mercado de la patata invita al optimismo. "Desde febrero, los precios han caído en picado. Y ahora que empiezan a salir las primeras patatas nuevas, la situación se presenta aún más complicada", concluye Van Haandel.
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