La temporada pasada, la ausencia de dátiles tunecinos, en particular de la variedad Deglet Nour, se hizo notar en varios mercados, sobre todo en vísperas del Ramadán. Esto obligó a los importadores a buscar otros orígenes competidores o a abastecerse de diferentes variedades de dátiles, lo que provocó un desplazamiento del mercado, con resultados desiguales. Faouzi Ben Ghazi, responsable de exportación de la empresa tunecina Sonab, asegura que es poco probable que esta situación se repita la próxima temporada.
Ben Ghazi afirma: "La temporada pasada fue especialmente difícil. Marcada por fuertes lluvias y una humedad excepcionalmente alta durante el periodo de cosecha, la producción tunecina se resintió tanto en cantidad como en calidad de textura. El resultado fue una pérdida del 50% de los volúmenes habituales. Sin embargo, puedo asegurar que un escenario climático así es excepcional y solo se da una vez cada veinte años".
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Según Ben Ghazi, la temporada anterior no resultó rentable para los exportadores. Sin embargo, más allá de la rentabilidad, el reto era mantener la fiabilidad del origen tunecino. El exportador añade: "En Sonab, somos la cuarta generación de productores, y gracias a nuestra experiencia local y al estricto cumplimiento de las normas de calidad, hemos podido mantener nuestro compromiso con nuestros clientes, quienes han apreciado especialmente nuestra capacidad de adaptación. A pesar de los retos, hemos superado la prueba de la fiabilidad con nota".
El exportador promete una fuerte recuperación de los dátiles Deglet Nour, ya en la próxima temporada. "Hasta ahora, las condiciones para la próxima temporada son muy favorables. Los primeros indicios son alentadores, y prevemos dátiles Deglet Nour tunecinos de calidad superior. Se han realizado importantes esfuerzos para proteger y cuidar las palmeras datileras, que complementan la notable mejora de las condiciones meteorológicas. También esperamos un marcado aumento de la demanda internacional de dátiles tunecinos, impulsada por varios factores. En primer lugar, la alta calidad esperada de la próxima cosecha, así como las perspectivas de escasez en otros grandes países exportadores, como Irán y Palestina, lo que refuerza también el atractivo de los dátiles tunecinos en el mercado mundial. El aumento de la demanda asiática, que ahora se extiende a todo el año, también apoya esta tendencia. Por último, el creciente interés de las industrias transformadoras internacionales por los dátiles deshuesados y sus derivados (pasta, jarabe, azúcar natural, etc.), gracias a las excepcionales propiedades nutricionales de los dátiles Deglet Nour, su resistencia natural a los diferentes climas y su excelente relación calidad-precio", argumenta Ben Ghazi.
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La temporada pasada, varios importadores de Europa y el norte de África señalaron dificultades para abastecerse de la variedad Deglet Nour de orígenes competidores ante los problemas de suministro en Túnez. Para Ben Ghazi, "esto demuestra no solo que la oferta tunecina no es fácil de sustituir, sino también que los exportadores tunecinos recuperarán rápidamente su cuota de mercado la próxima temporada".
"Este es otro factor estructural que favorece a los dátiles Deglet tunecinos: los problemas de calidad que encuentran otros orígenes debido a la congelación obligatoria del producto durante el transporte. Esta práctica habitual entre algunos competidores altera la textura y el sabor de los dátiles una vez expuestos a temperaturas ambiente. En cambio, nuestros dátiles son naturalmente resistentes y no precisan congelación, lo que garantiza una mayor estabilidad a lo largo de la cadena de suministro. En última instancia, esto refuerza la posición de los dátiles tunecinos como referencia de calidad en el mercado mundial", prosigue Ben Ghazi.
"El sector de la exportación de dátiles tiene una larga historia en las exportaciones agrícolas de nuestro país y está sujeto a una estricta supervisión gubernamental. A diferencia de otros orígenes, nosotros no manipulamos los parámetros de producción o exportación mediante prácticas como la cosecha temprana o la maduración acelerada. Todo se hace siguiendo las mejores prácticas para garantizar la calidad por encima de cualquier otra consideración comercial", añade.
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Para la próxima temporada, Sonab tiene la vista puesta en dos grandes mercados, según su responsable de exportación: Europa y Asia. "Tras cinco campañas de cosecha difíciles, prevemos una mejora significativa tanto en el volumen como en el alcance geográfico de la cosecha de este año. Con un impulso renovado, aspiramos a ampliar las ventas de nuestros dátiles de categoría premium y estándar en mercados nuevos además de en los que ya tenemos. En cuanto a los precios, consideramos que un precio justo debería reflejar las dificultades en el frente de la producción, así como la mejora de la calidad, aumentando en consecuencia con respecto a la temporada pasada".
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Faouzi Ben Ghazi
Sonab
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