Bajo el amparo de la Denominación de Origen Protegida Peras de Rincón de Soto, se cultiva una de las frutas más reconocidas en el mercado, la pera Conferencia. Las características del terreno y la bonanza del tiempo han arrojado una predicción positiva en cuanto a esta campaña que comienza en pocas semanas.
"El temporal de granizo de primavera no ha dañado la cosecha; ha caído en zonas concretas, pero no nos ha afectado. Aunque aún queda un mes por delante, creo que, en La Rioja, será un año bueno en calidad y en cantidad de pera Conferencia", dice Remedios Jiménez, gerente de Agroalimentaria de La Rioja.
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Esta empresa produce fruta y verdura al por mayor para el mercado nacional y algo para la exportación. "Entre las variedades de pera que cultivamos están las propias del verano como Moretini, Ercolini o Limonera, pero la más importante es la Conferencia con DOP Peras de Rincón de Soto. Si producimos 5 millones de kilos, 3 serían exclusivamente de esta pera", señala Jiménez.
Las características que hacen de Conferencia una pera especial "son sus muy elevados niveles de azúcar combinados con su dureza. Hablamos de un dulzor mínimo de 13° Brix llegando hasta 20°, sin menoscabar el bocado crujiente", señala la gerente, y añade que "a esto hay que sumarle la conservación óptima, pues aguanta varios meses en atmósfera controlada".
"La calidad y sabor de la pera Conferencia vienen dados por las características de Rincón de Soto (La Rioja), porque los contrastes de temperatura son ideales; con los días de calor a 30 °C, gana azúcares y con las noches frescas a 14 °C, mantiene esa dureza", explica Jiménez.
En agosto comienza la recolección de la pera Conferencia, que "lleva 2 o 3 semanas y tiene que hacerse rápido. Después pasa a cámaras de atmósfera controlada y puede aguantar hasta junio".
"No me gusta solapar campaña porque pienso que en verano la gente tiene que comer fruta de verano y la pera Conferencia en invierno, que es su mejor momento. Todos tenemos que poder vender lo que producimos en cada estación del año, creo que sería buena una educación del consumidor en cuanto a esto", subraya la gerente.
El cultivo de pera en La Rioja aumenta tras la DOP Rincón de Soto pero "sin sobresaltos", dice la responsable. "Los frutales que no se adaptan bien a la zona van desapareciendo, como la manzana, por ejemplo. Aquí sigue habiendo mucha pera porque la tierra y las condiciones son excepcionales".
Las condiciones cambiantes del clima han conllevado nuevas variedades, pero "el peral puede llegar a 50 años de vida con la buena mano del agricultor, ya que es un cultivo que necesita una cierta especialización, que se recoge a mano y necesita muchas podas", concluye la responsable.
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Remedios Jiménez
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