La demanda de fruta de hueso ha bajado en las últimas tres semanas. En el caso de la ciruela, se confía en que en las próximas semanas vayan reactivándose las ventas de cara a la cosecha de la variedad Angeleno, que este año vendrá más tarde. Hasta entonces, se prevé una menor disponibilidad de variedades negras.
"En estos momentos las ventas son bastante lentas, tanto en ciruela como en el resto de especies, aunque han mejorado ligeramente frente a las dos semanas anteriores, ya que la demanda bajó de forma notable a partir de la última semana de julio", cuenta José Aurelio García, gerente de la cooperativa extremeña Explum. "Por ejemplo, aunque ya nos queda poca cantidad de paraguayo a estas alturas, hace unos 25 días 'se peleaban' por él, y ahora no hay interés. La nectarina, sin embargo, parece ser el producto con ventas relativamente más dinámicas", indica.
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La ciruela, el fruto más representativo en volumen para Explum, así como para Extremadura, se encuentra en estos momentos entrando en el último tercio de campaña, faltando por recolectar las variedades más tardías, entre las que destaca, sobre todo, Angeleno, en el mes de septiembre.
"La cosecha de ciruela Angeleno vendrá con retraso este año respecto a la campaña anterior, aunque con una producción similar", avanza José Aurelio. "Se trata de una variedad de referencia que, por su popularidad y reconocimiento en los mercados, podría decirse que 'juega en una liga aparte'. Las ventas siempre mejoran cuando disponemos de esta variedad y, hasta entonces, habrá una menor disponibilidad de variedades negras como Larry Ann, lo que podría hacer que en las próximas semanas suba la demanda".
Hasta ahora, de acuerdo con el gerente de Explum, los precios de la ciruela han sido relativamente buenos durante toda la campaña, con una producción aceptable, sin ser excesiva. "Las ventas en contenedores a ultramar han ido bastante bien, con precios correctos en líneas generales", destaca.
